A las patadas, entraron a robar en un Jardín de Infantes de Ringuelet

La primera vez siempre sorprende y duele. Pese al contexto de inseguridad, que se ha hecho presente en la gran mayoría de los establecimientos educativos de la Región (ver aparte), no es el caso del Jardín Municipal Nº 6 “Hugo Stunz”, ubicado en la calle 2 bis entre 516 y 517 de Ringuelet, donde nunca habían entrado a robar.

Así lo destacó ayer en diálogo con este diario Andrea (34), la directora del establecimiento.

Parada en la entrada, junto a un montón de auxiliares, su rostro evidenciaba una mezcla de desazón y amargura.

“Hace dos años que estoy acá y nunca había pasado algo así”, aclaró.

Una de sus compañeras, con mayor recorrido en la institución, agregó: “Jamás”. Por eso el dolor de saber que tanto esfuerzo para asistir a 93 chicos del barrio, en el que abundan las necesidades, quedó literalmente hecho añicos.

“Creemos que entraron por los techos de un salón de fiestas que tenemos al lado. Rompieron cinco puertas a patadas y revolvieron varias oficinas, entre ellas la dirección”, contó Andrea.

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“Nos sacaron una computadora, un equipo de música, un modem, un televisor y material con el que se dan las distintas actividades”, añadió.

El jardín, con turnos mañana y tarde, cuenta con sala de 2, 3, 4 y 5 años.

La directora aseguró que mañana las clases se reanudarán normalmente.

“Veremos cómo nos arreglamos, pero el jardín estará abierto como siempre”, mencionó.

Previas comunicaciones de rigor, nos referimos a la exposición en la comisaría jurisdiccional (la sexta), que convocó a peritos de Policía Científica para que analizaran si en la escena del robo todavía subsistían huellas de los delincuentes aptas de cotejo probatorio, y el aviso a la inspectora del área, quedaron a la espera de la llegada de un herrero.

“Tenemos que asegurar de algún modo las puertas dañadas. Así no podemos dejar el Jardín”, concluyó Andrea.

Cabe destacar que en una de las salitas los responsables de la entidad encontraron materia fecal y en la misma recorrida aparecieron las marcas de las patadas en varios sectores de la institución.

Los investigadores consultados por EL DIA presumen que los vándalos vivirían en las inmediaciones, aunque al cierre de esta edición no se tenían sus identidades.

Por lo ocurrido, tomó intervención la UFI de Autores Ignorados Nº 9 del Departamento Judicial de La Plata.

ANTECEDENTES EN LA ZONA

A sólo media cuadra del Jardín de Infantes “Hugo Stunz” funciona la Escuela Nº 60, sobre la esquina de las calles 2 bis y 515, la cual ya ha sido blanco de repetidos ataques delictivos.

Uno de ellos tomó mayor trascendencia, ya que entre los objetos robados figuraba la torta con la que pensaban festejarle el cumpleaños a uno de los alumnos.

La presencia de un estudiante armado fue otro de los episodios de violencia, que provocó gran conmoción en esa comunidad educativa. Afortunadamente, se trató de un revólver no apto para el disparo.

El Jardín de Infantes donde ocurrió el robo tiene una matrícula de 93 alumnos