Alfaro, un trotamundos del fútbol que comienza con su último gran desafío

Empezó de abajo, en su Rafaela natal, y a partir de allí fue construyendo su carrera como director técnico de a poco y apostando siempre por el trabajo. Hoy, a sus 56 años, dará comienza a su último gran desafío: será presentado desde las 18 como nuevo entrenador de Boca. Su primer entrenamiento lo dirigirá mañana, pero esta tarde le pondrá la rúbrica al contrato y hablará por primera vez públicamente como DT del Xeneize, uno de los clubes más importantes del país y el continente.

Alfaro empezó en el mundo del fútbol jugando, aunque su carrera fue corta y no tuvo demasiado trascendencia. Jugó de 1988 a 1992 en Atlético de Rafaela y, con tan solo 28 años, colgó los botines e inmediatamente empezó a dirigir a la Crema junto a Victor Bottaniz. Su primera experiencia en el banco de los suplentes fue positiva: 55,16% de efectividad en tres temporadas y un segundo puesto en la temporada 1994/95 que no pudo materializar en ascenso ya que perdió en las semifinales del Reducido.

Tras seis meses en Patronato, que por entonces jugaba en el Torneo Argentino A, tuvo su primera experiencia al mando de Quilmes en la temporada 1996/97. Al año siguiente volvería a Rafaela hasta el 2001, en donde se puso al frente de Belgrano en la Primera División. No le fue muy bien en el Pirata y, tras 14 partidos y apenas 2 derrotas, se fue.

Pero luego le llegarían dos temporadas bañadas de gloria: ascendió a la máxima categoría con Olimpo, en la 2001/02, y con Quilmes, en la 2002/03. En el Cervecero se quedó a disputar el torneo de Primera y realizó un verdadero campañón ya que consiguió las clasificaciones a la Copa Sudamericana y la Copa Libertadores, todo un logro para el club.

Estas buenas campañas le permitieron llegar a San Lorenzo en el 2005, su primera experiencia en un club de los denominados grandes, pero los resultados no lo acompañaron. 8 victorias, 5 empates y 9 derrotas sentenciaron su anticipado final en la institución azulgrana.

ÍDOLO ETERNO DE ARSENAL

No hay mal que por bien no venga: esa salida de San Lorenzo le permitió llegar a Arsenal, que estaba buscando técnico, y comenzó a forjar su etapa más gloriosa como DT hasta el momento. En el 2007 levanta la Copa Sudamericana con el conjunto de Sarandí, mientras que en el 2012 consigue el Torneo Clausura y la Supercopa Argentina, mientras que al año siguiente se queda con la Copa Argentina.

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En el medio tuvo un breve paso por Rosario Central, otro desafío en una importante institución del país que no le resultó: 2 victorias, 2 empates y 10 derrotas. Regresó a Sarandí para levantar los títulos anteriormente detallados.

En 2014, tras un largo período en el Arse, se mudó a Tigre y estuvo hasta el 2015 con una aceptable campaña: 48,29%.

UN HOMBRE LIGADO A LA CIUDAD

Antes de asumir en Gimnasia en el 2016, en donde cosechó el 55,88% de los puntos y alcanzó las semifinales de la Copa Argentina, estuvo en varias ocasiones en el radar de Estudiantes. En el 2012 fue cuando más cerca estuvo de asumir en el Pincha, pero tras ganar el Clausura con Arsenal desechó la oferta albirroja y continuó en la institución de Sarandí.

Igualmente, más allá de no haber dirigido a Estudiantes, mantiene una gran relación con Leandro Desábato, Agustín Alayes, Israel Damonte, entre otros, ya que los dirigió en distintos clubes.

Volviendo a su etapa en el Lobo, consiguió la clasificación a la Sudamericana 2017 (perdería frente al Ponte Preta de Brasil en la primera ronda) y el equipo, de a poco, parecía encontrar la regularidad. Pero en el primer semestre del 2017 hilvanó una seguidilla de malos resultados y se terminó yendo tras perder el clásico por 1-0 con gol, curiosamente, de Damonte, a quien luego dirigiría en Huracán.

El Globo de Parque Patricios fue su última experiencia antes de Boca. Sumó el 58,59% de los puntos, engrosó el promedio del equipo y clasificó a la Copa Libertadores.

MANOS A LA OBRA

Tras ser presentado oficialmente hoy por la tarde en Boca con una conferencia de prensa, en donde también estarán presentes Daniel Angelici y Nicolás Burdisso, Alfaro dirigirá su primer entrenamiento mañana en Casa Amarilla, en donde empezará a conocer a sus nuevos dirigidos.

Su primer encuentro será un amistoso frente a Unión el 16 de enero en Mar del Plata, mientras que el debut oficial lo tendrá el domingo 27 de enero en un partido contra Newell’s por la jornada 16 del campeonato de la Superliga.

El gran objetivo que tendrá este año en el Xeneize será la Libertadores, la cuál comenzará el 5 de marzo visitando a Jorge Wilstermann.