Los "chalecos amarillos" se volvieron a manifestar en París y hubo incidentes

Los "chalecos amarillos", el movimiento contestatario que convulsionó la política francesa desde que comenzó en noviembre de 2018, se volvieron a manifestar en París y varias ciudades de Francia, en las que se registraron momentos de tensión.
En París hubo altercados entre manifestantes y policías, que lanzaron gases lacrimógenos y balas de goma, en la céntrica plaza de la República.

El Ministerio del Interior informó que se registraron 30 detenciones, mientras un sindicato estudiantil denunció que un joven resultó herido de gravedad por una bala de goma.

Además reportó que en toda Francia hubo 58.600 participantes, menos que los 69.000 del sábado anterior, según reprodujo la radio pública France Info.

Entre las movilizaciones más numerosas destacaron la de París, en la que los medios franceses estimaron una afluencia de 13.800 personas, y la de Valence (sudeste), con 5.400.

Esta duodécima jornada de protesta también tuvo eco en otras ciudades francesas, donde también hubo varios heridos -entre ellos policías- y detenidos, según el canal público France 3.

"El tema de hoy es la violencia policial, porque es insoportable; nos prohíben manifestarnos y nos disparan sin ninguna razón, hay una gran represión, hay muchos heridos; nacimos como un movimiento pacifista y no se entiende esa violencia", dijo a la agencia de noticias EFE uno de los integrantes de la protesta de París.

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Jérôme Rodrigues, uno de los símbolos del movimiento, denunció haber sido herido en el ojo derecho por un proyectil policial el sábado pasado, se sumó a la protesta entre vítores de los activistas.

Rodrigues, subido a una tarima, pidió la dimisión del presidente francés, Emmanuel Macron, e incentivó a los manifestantes al inicio de la marcha, en la que figuraron varios líderes de facto del movimiento, entre ellos el camionero Eric Drouet.

Drouet calculó más de 100 heridos en sus rostros por los disparos policiales, algunos de ellos con lesiones irreversibles.

La manifestación de hoy tuvo lugar un día después de que el Consejo de Estado amparase que la policía pueda usar las pistolas LBD40 que disparan simultáneamente decenas de balas de goma para controlar disturbios en manifestaciones.

Desde el 17 de noviembre, se sucedieron numerosas enfrentamientos violentos durante las marchas; el más recordado fue el del 2 de diciembre, cuando fue saqueado el Arco del Triunfo parisino.

La movilización de este sábado también coincidió con la presentación de varias listas a las elecciones europeas de fines de mayo de grupos que se reivindican como miembros de "chalecos amarillos".