Cambiemos quiere habilitar las PASO en Mar del Plata para mantener unida a su tropa
Edición Impresa | 25 de Febrero de 2019 | 02:40

Mariano Pérez de Eulate
mpeulate@eldia.com
General Pueyrredón se encamina a ser una suerte de excepción en la estrategia del oficialismo provincial según la cual se desalentará la posibilidad de Primarias Abiertas para cargos municipales en aquellos distritos que gobierna Cambiemos. En efecto, para Mar del Plata -cabecera rutilante de ese partido- María Eugenia Vidal habilitó la realización de esos comicios, que serán en agosto próximo y que podrían enfrentar al actual intendente con el radicalismo y con un candidato del PRO que responde directamente a ella.
No es un secreto que la Gobernadora está muy disconforme con la gestión del jefe comunal, Carlos Arroyo, quien llegó al municipio con un partido propio que integró el frente Cambiemos. Han sido públicos los desencuentros con Vidal. El más célebre: cuando, a fines del año pasado, en la inauguración de las playas públicas, el hombre se fue del acto oficial porque lo ubicaron en un sitio marginal del escenario, como para invisibilizarlo. Se sintió ninguneado.
Cerca de Vidal conceden que, a pesar de las diferencias, el intendente nunca abandonó Cambiemos y que, justamente por eso, no pueden dejarlo afuera de las PASO. Salvo, claro, que él mismo decida romper con la Gobernadora y postularse por afuera del oficialismo, en un esquema de municipalización de su campaña.
En verdad, en La Plata creen que esto es muy posible porque, como a todo dirigente que gobierna, a Arroyo no le hace mucha gracia que lo desafíen desde su propio espacio. “Que lo termine sancionando la gente, no nosotros”, se escuchó en un encumbrado despacho del vidalismo.
El candidato a intendente de la Gobernación, hasta ahora, viene siendo el diputado nacional Guillermo Montenegro, que multiplicó sus apariciones en La Feliz pegadito como una estampilla a Vidal y también en plan de campaña él solo. Detrás de esa postulación aparece el sostén territorial que pueden acercarle sectores locales de Cambiemos, alejados de Arroyo y también del radicalismo. Como los que se referencian en el senador provincial Lucas Fiorini, de formación justicialista y quien reconoce como terminal en La Plata al ministro de Gobierno, Joaquín de la Torre.
El otro senador provincial que tiene Mar del Plata, Franco Bagnato, aparecía como una apuesta inicial de la Gobernación dado su nivel de conocimiento en la Ciudad. Sin embargo, con el correr de los meses no pareció prosperar. Acaso el periodista sea un “Plan B” de Vidal, si se desinfla la jugada de postular a Montenegro.
El radicalismo, que a nivel global pasa por una etapa de tirantez en su relación con el macrismo puro, tiene posicionados dos nombres para el caso de una Primaria marplatense. La concejal Vilma Baragiola, con amplio nivel de conocimiento, viene trabajando hace tiempo para quedarse con la postulación. Pero, en rigor, no es muy querida en los despachos de La Plata. Y también está el diputado provincial y jefe del bloque Cambiemos, Maximiliano Abad, quien aspira a lo mismo y, en su caso y por cuestiones obvias, tiene mucho mejor diálogo con el Ejecutivo provincial.
Según fuentes marplatenses, la diferencia entre estos dos radicales es que Baragiola está convencida de que se impondría en una interna contra Arroyo mientras que Abad preferiría evitar la PASO, convencido de que todos los cañones deben ser apuntados a la general.
En rigor, en la Gobernación sostienen que hacer la primaria en Mar del Plata garantiza la contención de todos los sectores internos en momentos en que la gestión local de Arroyo no goza de alta popularidad y, del otro lado, el kirchnerismo viene trabajando seriamente para desbancar a Cambiemos del municipio detrás de la figura de la diputada nacional Fernanda Raverta.
Conviene volver a Cambiemos. El último pre-candidato anotado es de la Coalición Cívica. Se trata del diputado provincial Guillermo Castello, que ya obtuvo el visto bueno de Elisa Carrió para dar la pelea, según fuentes partidarias. Fue en una reciente reunión en la ciudad de Azul. En rigor, Lilita preferiría verlo otra vez como legislador pero el hombre suele suplir la falta de recursos monetarios para desplegar campaña territorial con “bombazos” disruptivos que tienen repercusión mediática. El último: propuso sacarle los subsidios a los que hagan piquetes.
Por iniciativa de la Gobernación, todos estos nombres mencionados como pre-candidatos fueron juntados para una foto grupal en ocasión de la inauguración de un sanatario de la ciudad. Fue a fines de enero, plena temporada veraniega.
Para Vidal en particular y Cambiemos en general, Mar del Plata es electoralmente crucial. Por su cantidad de votantes, es el distrito con mayor peso electoral del interior provincial. El oficialismo necesita hacer una buena elección en ese tipo de territorio para contrarrestar lo que, suponen, será un resultado adverso en el Conurbano bonaerense. Encabeza, junto a La Plata, una lista reservada -revelada por este diario- que contiene los municipios a los que el macrismo considera como “prioritarios” para garantizar la reelección de la Gobernadora.
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