Eclipses: lo que pasó y lo que vendrá

Desde mediados de 2016 hasta principios de 2019, los eclipses (solares y lunares) se dieron en el eje Leo-Acuario. Esa serie ya llegó a su culminación, pero nos ha cambiado. En algún sentido, todos hemos dejado morir una imagen de nosotros mismos. Ya somos otros.

¿Qué se viene con la serie de Eclipses que comienza ahora y activará la zona Cáncer-Capricornio de nuestra Carta Natal? ¿Cuál será el aprendizaje en los próximos tres años? Sin importar de qué signo somos, este proceso nos implicará a todos.

Si tuvieras que elegir cinco adjetivos para describir quién eras hace tres años, ¿cuáles serían? Ahora pensá cinco adjetivos para caracterizar quien sos hoy. ¿Qué cambió? ¿Qué sigue igual? ¿En qué sentido te reconocés diferente?

La serie de Eclipses de los últimos tres años cambió la imagen que teníamos de nosotros mismos. De acuerdo a nuestra Carta Natal, ese proceso puede visibilizarse en diferentes ámbitos de nuestra vida. Pero de alguna manera, se trató de re-inventarnos y de re-conocernos. En vos, ¿cuál fue el aprendizaje? ¿Supiste re-crearte? ¿En qué te resulta más evidente?

Ahora comienza una serie en el eje Cáncer-Capricornio. El proceso nos pedirá evaluar el equilibrio entre nuestra vida personal, emocional, afectiva, que se desarrolla en el mundo interno (Cáncer) y nuestra vida laboral, profesional, social, que tiene lugar en el mundo externo (Capricornio).

Quienes registren que han puesto un exceso de energía y atención en desarrollarse en el trabajo, sentirán la necesidad de darle mayor lugar al mundo afectivo, a la subjetividad, a la vida íntima y familiar. Para estas personas será duro descubrir que han vivido las emociones o los afectos como algo de menor importancia, con la consecuente deshumanización que eso implica.

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Por el contrario, quienes se encuentren con que no han valorado lo suficiente la realización laboral o profesional, sentirán la ausencia de una estructura firme y necesitarán salir a construirla, cultivando una adultez más responsable. Estas personas deberán aprender a darle lugar en sus vidas a una sana ambición, al establecimiento de metas y objetivos, así como a relaciones más impersonales y a una mirada objetiva de la realidad.

¿QUÉ SIMBOLIZAN LOS ECLIPSES?

Astronómicamente, un eclipse ocurre cuando un cuerpo tapa a otro y dejamos de verlo por un rato. Astrológicamente, eso significa que algo en tu vida deja de estar, definitiva o momentáneamente. Puede ser algo externo, notorio (un trabajo, una relación, una persona, un lugar) o algo interno, más sutil (un sentimiento, una forma de pensar, una creencia, una vocación).

Lo importante es la toma de conciencia: observar lo que se eclipsa en nosotros y preguntarnos: ¿por qué? ¿para qué? Lo que se eclipsa, simbólicamente, nos muestra el lugar que le dábamos a eso y nos permite repensar el espacio que queremos darle (¡o no darle más!).

Las temporadas de Eclipses ocurren dos veces por año y en cada una pueden darse dos o tres Eclipses. No siempre “pasa algo” (aunque a veces nos movilizan emocional o físicamente). Lo importante es registrar el proceso global, que tiene una duración de unos 3 años. Vivirlo con conciencia nos permite ser operadores de nuestros cambios, en vez de sentir que la vida nos sorprende y nos obliga.