Terror en un edificio por un intento de golpe “piraña” que frustraron los perros

La tranquilidad de la madrugada de ayer se quebró súbitamente en un edificio de 58 entre 24 y 25, por los constantes y enloquecidos ladridos de los perros de los vecinos.

A poco de despertarse sobresaltados, algunos de los que viven en esas dos torres de tres pisos, con 11 departamentos cada una, alcanzaron a ver que una banda de encapuchados había irrumpido en sus edificios y que procuraban escapar corriendo, al saber descubiertos.

“Eran entre 10 y 12”, contaron algunos vecinos, con un tono de voz que, varias horas después, todavía reflejaba el pavor que les causó observar la escena por las cámaras de seguridad. Esos mismos registros les permitieron ver que los delincuentes fugaron luego de treparse a algunas paredes linderas y llegar así hasta los techos.

“Previamente quisieron huir por la puerta principal del edificio, que la habían forzado al ingresar”, contó a este diario Nicolás (28), que vive en una de esas torres, “pero desde adentro no consiguieron abrirla, porque tiene un dispositivo que responde a las llaves electromagnéticas que tenemos todos”.

También reflejó que “al escuchar ladrar mucho a los perros, muchos nos despertamos y al escuchar ruidos y movimientos extraños de gente en los pisos, avisamos a la Policía”.

“Ya sufrimos tres o cuatro intentos de robo en el edificio y en agosto desvalijaron tres departamentos”

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Nicolás (28) Vive en una de las dos torres

Los patrulleros llegaron rápido. Visualizando las imágenes, los policías les preguntaron a los damnificados si reconocían a los intrusos, “pero solamente uno estaba a cara descubierta. Los demás estaban encapuchados”, razonó Nicolás.

El joven precisó que el grupo que se coló en el edificio apelando a la modalidad conocida como “piraña” lo hizo “a las 3 y cuarto de la mañana” de ayer, y cinco minutos después “ya estábamos despiertos por los ladridos de los perros”. Esos movimientos frustraron el robo.

PREOCUPACIÓN Y REUNIÓN

Junto a Nicolás había otros vecinos del edificio, quienes también evidenciaron la preocupación que impera entre todos, no sólo por el episodio de ayer. Según reconocieron, éste vino a sumarse a otros similares.

“Hace 10 días rompieron la cerradura de la puerta del frente, aunque no lograron entrar. Pero en agosto (del año pasado) consiguieron desvalijar tres departamentos de la primera de las dos torres”, refirieron en una charla con este diario.

Nicolás destacó que, “en total, van tres o cuatro hechos de inseguridad”, por lo que el incidente de la madrugada los convenció de la necesidad de juntarse para debatir algunos métodos de prevención que los ponga a resguardo del acecho delictivo que están padeciendo.

En la reunión que se realizaba anoche se puso a consideración la propuesta de apelar al sistema de Alerta Vecinal que ya funciona en distintos varios barrios platenses, con la instalación de sirenas y luces que, colocadas en columnas de alumbrado público, se activan desde un control remoto que puede pulsar cualquiera de los frentistas que contratan este mecanismo disuasivo.

“Si decidimos encararlo tenemos que consensuar con los restantes vecinos de la cuadra, porque el beneficio sería para todos”, reparó Nicolás.

EL CASO DE LA LOMA

Como lo reflejó este diario en una edición anterior, el 23 de febrero pasado los habitantes de un edificio de 46 entre 29 y 30 denunciaron que se registraron “4 robos en un año”.

Puntualizaron que todos fueron escruches y que tienen filmados a los delincuentes, que serían menores de edad.

Al igual que en el caso de los vecinos del edificio de 58 entre 24 y 25, en algunas ocasiones los ladrones no lograron su cometido de poder entrar a robar.

Y también la inquietante situación los impulsó a reunirse para analizar y decidir qué hacer para conseguir que los delincuentes no sigan “teniendo de punto” a quienes viven en esa torre de departamentos.