El hospital de Gonnet se quedó sin agua y tuvo que reprogramar las cirugías

Un corte total de agua afectó ayer al Hospital San Roque de Gonnet, donde “ante la incertidumbre sobre el regreso del servicio” se decidió reprogramar todas las intervenciones quirúrgicas que estaban pautadas para hoy y que no implicaban “situaciones de emergencia”, se aclaró desde la cartera sanitaria bonaerense.

En el ministerio hablaron de la salida de servicio de “una bomba de agua”, mientras que la delegada general de ATE y enfermera del centro de salud, Georgina López, aseguró que “fallaron las dos bombas, la nueva y la antigua, como consecuencia de un corto, en el primer caso, y de una sobrecarga en el segundo”.

Aunque no fue posible establecer una conexión entre las fallas del sistema de energía eléctrica que tuvo a mal traer a toda la zona norte de la Ciudad durante casi cinco días y lo que ocurrió en el San Roque, no fueron pocos los que pusieron la lupa en algunos “cortes imprevistos y reposiciones del servicio con picos de tensión”.

Lo cierto es que, de acuerdo al relato de Georgina López, ayer a la mañana, cerca de las 11, “un corto provocó la salida de servicio de la bomba nueva. A partir de ese momento, el hospital, que necesita del agua en forma permanente y en áreas muy delicadas, siguió abasteciéndose solamente con la bomba antigua, hasta que no dio abasto y también se averió”, dijo la enfermera y delegada gremial.

Fue entonces cuando, por prevención, se decidió reprogramar todas las cirugías pautadas para hoy. “Es que en el momento en que el centro se quedó sin agua las autoridades no podían saber a qué hora se iba a restablecer el servicio, por lo cual pospusieron las intervenciones que no revestían urgencia”, dijeron en el ministerio de Salud.

En la cartera sanitaria, a primera hora de la tarde, estimaron que en torno a las 19 el San Roque recuperaría el suministro de agua. Sobre las 21 informaron que el problema ya estaba resuelto.

Y aseveraron que “las áreas críticas del hospital nunca dejaron de tener agua, ya que se tomó la precaución de racionarla para atender esos sectores sensibles”.

Georgina López puntualizó que el Hospital de Gonnet cuenta con “un centenar de camas, todas ocupadas y con lista de espera debido a que se está recibiendo demanda que antes atendían otros centros de salud, como el de Florencio Varela y el Evita Pueblo (Berazategui), que tuvieron que cerrar servicios a causa de los recortes que se vienen aplicando en el sistema sanitario provincial”.

“La dirección se mueve y mucho, pero la planta de personal se congeló y cada vez viene más gente”, acotó la profesional.