La compra de divisas para adquirir viviendas fue mucho más light que la anunciada
Edición Impresa | 21 de Septiembre de 2019 | 04:20

Finalmente salió la resolución del Banco Central que autorizó la venta de dólares para los que deseen adquirir un inmueble, pero con restricciones: solo alcanza a las personas que tengan préstamos hipotecarios aprobados para adquirir una vivienda única, familiar y de ocupación permanente; y podrán pedir hasta 100 mil dólares.
Pero la norma indicó que, en realidad, la compra de esos dólares consiste en anticipar el cupo mensual de U$S10.000 para atesoramiento por mes. De esta manera, quien compre U$S 100.000 en una sola vez para abonar un inmueble, no podrá volver a adquirir moneda extranjera para atesorar por 10 meses.
“Se cumple con el 50% de lo que habíamos pedido y el resto sigue en estudio”, sintetizó Armando Pepe, presidente del Colegio Único de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires, quien agregó: “Solicitamos que se destrabaran las operaciones con préstamos hipotecarios otorgados y, además, que se puedan comprar dólares para adquirir viviendas de cuyo valor sea de hasta 220.000 UVA. Se aprobó la primera parte y nos dijeron que el segundo punto sigue en discusión y podría salir la semana que viene”.
Hay más de 1000 carpetas de préstamos hipotecarios aprobados en los bancos cuyo desembolso no se efectuó debido a las restricciones cambiarias establecidas el 1° de septiembre.
En ese sentido, Pepe consideró que la medida no tendrá un gran impacto en las inmobiliarias debido a que, en muchos casos, esas operaciones ya se contabilizaban como hechas, aunque restaba realizar el pago. “Estamos pensando en acompañar a la gente que la está pasando mal en este momento”, afirmó.
Con la incertidumbre cambiaria y el salto inflacionario, la compraventa de inmuebles está viviendo un año para el olvido. Según los últimos datos del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, en julio la cantidad de operaciones con hipotecas sumó 235 casos, es decir, un 66 por ciento menos que las registradas un año antes. Es un número incluso menor a los vistos durante el cepo cambiario kirchnerista. Con respecto al total de escrituras, las realizadas con hipotecas significaron en julio el 7,3%, mientras que en igual mes de 2018 habían representado el 15,6 por ciento.
El stock de préstamos hipotecarios, con mayoría de créditos indexados por inflación, había crecido hasta superar los $ 200.000 millones en agosto del año pasado y el último dato disponible, al 16 de septiembre, habla de un saldo algo superior a $ 212.000 millones.
El saldo se mantiene prácticamente estable en el último año debido a que los clientes bancarios no toman nuevos créditos hipotecarios UVA.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE