Automovilistas atrapados en el laberinto de los piquetes: ya ni en enero hay un respiro

Atrapados y resignados en el laberinto de los piquetes, los automovilistas platenses no descansan ni en enero del infierno vehicular. Años atrás el primer mes del año se caracterizaba por dar un respiro a los conductores, que podían moverse por el enrevesado tránsito local con un poco más de margen. Incluso las estadísticas sobre los cortes callejeros daban cuenta de que enero era el mes menos conflictivo en esta materia. Pero ayer La Plata dio una nueva muestra de que es la ciudad del piquete por excelencia, situación de la que ni siquiera el receso estival queda al margen.

Es que desde la mañana y hasta entrada la tarde, organizaciones sociales bloquearon los principales accesos al casco urbano y, en ese contexto, transitar por la Ciudad era, como otra tantas veces, un verdadero caos.

En esta ocasión las movilizaciones fueron llevadas adelante por las organizaciones de cooperativistas de la Región nucleadas en el Frente de Organización en Lucha (FOL) por aumentos salariales.

Uno de los puntos afectados por la medida era la rotonda de 120 y 32, donde se registraron congestionamientos en torno a la subida y bajada de la Autopista.

Por ese motivo, los desprevenidos automovilistas debían desviarse para ingresar a la autopista desde calle 122, mientras que en sentido a La Plata se desviaba el flujo vehicular hacia el ramal Gutiérrez.

Pero no fue ese el único punto donde los conductores quedaban “atrapados” por los piquetes: es que se montó otro bloqueo, en 7 y 72, donde se apostaron unos cien manifestantes ante la presencia de un grupo de policías. Otros puntos de protestas y complicaciones de tránsito fueron 13 y 32, 31 y 44 y la rotonda de 122 y 52.

Sobre el reclamo, los manifestantes sostuvieron que “debido a la pérdida de poder adquisitivo durante los últimos cuatro años, ahora más de mil familias platenses atraviesan momentos angustiantes debido a que con el haber mensual no logran satisfacer sus principales necesidades”.

El tránsito recién empezó a descomprimirse alrededor de las 14, luego de que los manifestantes fueron convocados por la Municipalidad. Desde el Municipio se explicó que recibieron a los cooperativistas, se abrió una mesa de diálogo y se les planteó que están esperando saber cuánto le corresponderá a la Comuna de los fondos nacionales y provinciales que restan girar para poder avanzar con las negociaciones.

COSA DE TODOS LOS DÍAS

Que en pleno enero la ciudad haya quedado sitiada por los piquetes ya no sorprende a nadie. Años atrás un estudio municipal expuso que en La Plata hay, en promedio, dos piquetes por día. El más reciente relevamiento oficial arrojaba como conclusión que el mes con menos protestas en la calle es enero y el más conflictivo es mayo. “Si ya arrancamos así el año que queda para lo que viene”, se lamentaba un taxista acostumbrado a lidiar con estos entreveros viales.

Según el mismo relevamiento, el fenómeno de los piquetes se da con mayor intensidad de martes a jueves.

Desde hace años que el “mapa” de los piquetes platenses distingue cinco zonas especialmente críticas: la primera de ella es el tramo de avenida 7 comprendido entre 47 y 50, seguido por las cuadras de la misma vía que van de 55 a 59.

Después de éstas, las zonas más críticas son 6 entre 50 y 54; 12 entre 49 y 54 y 13 entre 56 y 58, todos puntos que coinciden con dependencias en torno a las cuales se focalizan las protestas (Municipalidad, Gobernación, Dirección de Escuelas, Ministerio de Desarrollo Social).

En los últimos años a esta lista de escenarios se ha venido sumando, cada vez con mayor frecuencia, la subida a la Autopista La Plata.