Un pedido escrito para sostener la internación domiciliaria, que no encontró ninguna respuesta

Más allá de que el neurocirujano Leopoldo Luque negó que Diego Maradona haya sido trasladado a la casa del barrio privado San Andrés de Tigre con una internación domiciliaria, por recomendación de la psiquiatra Agustina Cosachov se había solicitado la presencia permanente de enfermeros, además de médicos especializados en consumo de sustancias, un neurólogo, un clínico y hasta una ambulancia.

Por eso el abogado más cercano a Diego en los últimos años, Matías Morla, redactó un comunicado en el que cuestionaba directamente a quienes estaban al cuidado del astro en el momento de su muerte, habló de “criminal idiotez” y aseguró que pedirá “que se investigue hasta el final”.

A partir de estas palabras, la mira está puesta en la obra social, ya que Morla entiende que no cumplió con los pedidos hechos por la especialista.

“Por medio de la presente se indica internación domiciliaria del paciente, solicitando cómo indispensable para llevar a cabo la misma: enfermeros preferentemente hombres con disponibilidad tiempo completo y especializados en problemática de consumo de sustancias, médico neurólogo y médico clínico. A su vez contar con la disponibilidad para realizarse estudios médicos y una ambulancia por si se considera necesario el traslado”, especifica la orden firmada por Cosachov. Nada más lejos de la realidad, ya que al momento en que se descubrió que Maradona no tenía signos vitales, sus acompañantes debieron llamar a una emergencia para que llegaran las ambulancias, las cuales tardaron más de diez minutos.

Las primeras maniobras de reanimación fueron realizadas por un médico, que es vecino del barrio San Andrés y fue convocado por la guardia de seguridad, ante la demora de los equipos de rescate.

Después, todos los esfuerzos resultaron en vano, confirmándose el fallecimiento de Maradona, noticia que dio la vuelta al mundo y generó un gran impacto, del que todavía mucha gente aún no puede salir.