Pidió “perdón” y se entregó el acusado de atropellar y matar al nene de 5 años

Más de una semana después de causar la muerte de Isaac Sus, de cinco años, y dejar con graves heridas a su mamá Débora; el conductor del VW Golf GTI que los atropelló en la esquina de avenida Directorio y San Pedrito, del barrio porteño de Flores, se entregó a la Policía. Se trata de un joven identificado como Rubén Emanuel Papadopulos (21), quien es hijo del dueño del rodado y que confesó ser quien manejaba la fatídica noche del 17 de diciembre.

“Le pido perdón a la familia”, dijo en el breve contacto que tuvo con la prensa, antes de ser ingresado en la sede de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, en Palermo.

En tanto, su abogado, Roberto Herrera, remarcó que “no tenía registro y se asustó por la situación”. Y añadió: “No sabía que se había muerto una persona, le dijo al padre que había tenido un accidente, pero se enteró (del deceso del menor) por los medios”.

Rubén Papadopulos (44), padre del acusado, se había presentado en la Comisaría Vecinal 7 A, acompañado de su abogado, dos días después del hecho.

Sin embargo, sería liberado por no estar vinculado en forma directa. Los investigadores sospechaban que no era él quien iba detrás del volante del vehículo deportivo, y una filmación les daría la razón. Minutos después del siniestro, las cámaras de seguridad de una cochera grabaron al joven mientras bajaba del Golf.

“PERDIÓ LA VISIÓN POR UN CAMIÓN”

Un vocero del caso señaló que Papadopulos se entregó luego de un arreglo entre su abogado y la Justicia. Dijo la fuente que el joven reconoció ser el responsable del incidente. “Es él quien manejaba el auto, estaba muy mal, muy angustiado, no deja de llorar”, aseguró Herrera, su defensor. Asimismo, refirió que el chico “quería presentarse en la justicia pero veía que estaba preso su papá por lo mismo que se lo imputaba a él”. Además, confirmó que la entrega “fue acordada con el juzgado”.

“Estoy esperando las primeras actuaciones, luego lo que surja de las pericias y después de la declaración de él”, añadió. Aunque nunca aclaró dónde estuvo Papadopulos los 8 días posteriores al choque, ni tampoco a dónde se dirigía el día en que atropelló a Isaac y su mamá. Solamente declaró que su cliente “quedará detenido” en la comisaría y va a declarar cuando lo llame el juzgado”.

Por otra parte, el letrado argumentó que el joven “pierde la visión de quienes estaban cruzando porque un camión pasó en rojo”. En ese sentido, indicó que todavía “no se citó al camionero”.

De igual modo, afirmó que Papadopulos circulaba a una velocidad que “no superaba los 55 kilómetros por hora” y que ese es uno de los datos que “determinará la pericia”. Herrera resaltó que a Papadopulos se lo acusa de “homicidio culposo” y sentenció que se trata de un delito excarcelable.

El hecho ocurrió el jueves pasado cerca de las 23 cuando el Volkswagen color blanco “cruzó un semáforo en rojo” y atropelló y mató a un niño de 4 años y dejó gravemente herida a la su mamá, cuando cruzaban la avenida Directorio, a la altura de San Pedrito, en el barrio porteño de Flores. El conductor fugó con su vehículo a gran velocidad, pero cámaras de seguridad lograron reconstruir casi toda la huida e identificar al conductor. A raíz del impacto el pequeño murió por la gravedad de las heridas en el Hospital Piñero, mientras que su madre continuaba internada en el mismo centro de salud con politraumatismos y fracturas varias.

El abogado de las víctimas, Gabriel Becker, destacó que “no solo no prestó auxilio, sino que fue perseguido por otros tres conductores antes de lograr escapar; y otra circunstancia agravante es la excesiva velocidad”.