Las ocho principales recomendaciones para mantener a raya la enfermedad

En medio de una pandemia y sin una vacuna eficaz, la mejor forma de mantener a raya al COVID-19 consiste por el momento en evitar el contacto con el virus que la produce. Para ello los principales orgasmismos de salud enfatizan la importancia de adoptar ciertos hábitos cotidianos que pueden marcar una diferencia vital.

Una de las acciones claves y más efectivas que deben incorporarse a la rutina diaria es lavarse las manos a menudo. Además, al toser o estornudar, hay que taparse la boca y la nariz con pañuelos desechables, o con la cara interna del codo, y lavarse las manos enseguida.

En el día a día, se debe mantener una distancia prudencial entre las personas y evitar el contacto cercano con quienes presenten síntomas de infección respiratoria.

No menos importante, señalan los especialistas, es abstenerse de tocarse la boca, la nariz y los ojos sin haberse lavado antes las manos, así como evitar compartir comida y utensilios sin limpiarlos debidamente. Como norma general hay que eludir las ambientes hacinados, teniendo especial cuidado en proteger de ellos a los grupos más vulnerables, como los ancianos y las personas con enfermedades crónicas.

1-Lavarse las manos con frecuencia

Debe hacerse con agua y jabón por al menos 20 segundos, en especial antes de comer o preparar alimentos y después de sonarse la nariz, toser o estornudar. Si no se cuenta con agua ni jabón, se puede usar un desinfectante de manos que contenga al menos un 70 % de alcohol.

2-No cubrirse la boca con la mano al toser o estornudar

Lo recomendable es usar un pañuelo descartable y desecharlo de inmediato a la basura, pero si no se cuenta con uno se puede utilizar el interior del codo para evitar que pequeñas gotas de saliva con carga viral alcancen a otras personas o contaminen superficies.

3-No compartir bebidas, vajilla ni alimentos

Debido a que el virus se transmite a través de la saliva de una persona infectada, una de las medidas para prevenirlo consiste en no compartir el mate, el vaso, las cantimploras y los cubiertos, como así tampoco la comida, ya sea ofreciendo un mordisco o con un tenedor.

4-Evitar llevarse las manos a la boca, los ojos y la nariz

Dado que aun lavándose las manos con frecuencia podemos entrar en contacto con el virus es recomendable evitar tocarse con ellas la cara. Y es que si bien la piel no es permeable al virus, no así las mucosas de la boca, nariz y los ojos, por donde puede ingresar a nuestro organismo.

5-Eludir las situaciones de hacinamiento

Como el virus puede trasmitirse de persona a persona a través de la expectoraciones que se producen al toser o estornudar, es conveniente evitar los lugares hacinados y mantener lo que se conoce como “distancia social”, es decir no acercarse a menos de un metro de los otros.

6-Desinfectar superficies y objetos de contacto habitual

Dado que el virus puede permanecer viable hasta días sobre algunas superficies se recomienda desinfectar aquellas con las que tenemos contacto frecuente, como teléfonos, teclados y escritorios. Se lo puede hacer con una mezcla de 7 partes de alcohol por 3 de agua.

7-Tratar de mantener una adecuada alimentación

Como el contagio de las infecciones respiratorias depende en gran medida de la fortaleza de nuestro sistema inmunológico, mantener una buena alimentación y evitar el consumo de tabaco y alcohol contribuyen a tener mayores defensas contra la enfermedad.

8-Quedarse en casa si uno se siente enfermo

Así como se recomienda mantenerse a distancia de personas que estén cursando una infección respiratoria también es importante evitarles a otros el contacto con nosotros quedándonos en casa si tenemos fiebre, tos, dolores musculares, dolor de garganta o dificultad para respirar.