VIDEO.- Pañuelazo en 7 y 50 por el Día Internacional de la Mujer

Cientos de mujeres de diferentes organizaciones feministas y partidos políticos de izquierda realizaron este mediodía  un pañuelazo en la esquina de 7 y 50 reclamando "separación de la Iglesia del Estado" y "aborto legal ya", al conmemorarse el Día Internacional de la Mujer.

Ayer, miles de mujeres marcharon por el centro de La Plata bajo la consigna "paren de matarnos", con la bronca de saber que se había cometido un nuevo femicidio en el país y en demanda de la legalización del aborto.

"Feliz día va a ser cuando no falte ninguna" o "Nada para celebrar, acá faltan las asesinadas" podía leerse en los carteles que portaban las mujeres que marcharon hoy desde Plaza Moreno a Plaza San Martín, en momentos en que se confirmaba un nuevo femicidio, el de Fátima Acevedo, en la ciudad de Paraná.

Con pañuelos verdes y glitters de ese color en su rostro, las mujeres cantaron consignas por el derecho al aborto legal y gratuito cuando pasaron frente a la Catedral de La Plata, que había sido vallada en prevención de desmanes.

Al llegar a las calles 7 entre 45 y 46, la marcha hizo un alto frente a la Casa de Sandra Ayala Gamboa, una joven asesinada en el 2007 en ese edificio que, entonces, pertenecía a la ex Dirección de Rentas bonaerense.

"Sandra /Presente/ Sandra/ Presente/ Ahora/ y Siempre", gritaron las mujeres en recuerdo a la joven asesinada, cuya madre Nelly Gamboa, encabezaba la marcha.

Con los ojos llorosos y el gesto adusto, Nelly expresó a Télam que "cada femicidio es muy doloroso, no queremos que nos sigan matando".

"Se necesitan leyes más duras que penalicen a los agresores, acompañar a las mujeres que denuncian, no dejarlas solas; les pedimos a la justicia que imponga mano dura ya para los femicidas", reclamó la madre de Sandra Ayala Gamboa.

La marcha continuó hasta la plaza Moreno de La Plata, donde adolescentes, con sus rostros pintados con glitter verde y violeta, marcharon con sus puños en alto y, frente a la Catedral local advertían sonrientes que "somos las nietas de todas las brujas que nunca pudieron quemar".