Abasto: sigue muy grave la mujer quemada y su marido pidió aislamiento

Romina Videla, la mujer de 39 años que el sábado pasado sufrió gravísimas quemaduras presuntamente causadas por su pareja, continuaba ayer internada en estado desesperante y esperaban su evolución para trasladarla a una clínica especializada, probablemente en la ciudad bonaerense de Tres de Febrero, confirmaron fuentes oficiales.

En las últimas horas la víctima tuvo una leve mejoría, aunque los médicos que la asisten en el hospital Alejandro Korn de Melchor Romero aclararon que la situación “es crítica porque tiene los órganos muy dañados”. Como viene informando este diario, Videla ingresó en ese centro asistencial en la madrugada del sábado pasado, con quemaduras en el 80 por ciento de su cuerpo.

Lo que inicialmente se investigó como un incendio accidental en una vivienda humilde de 519 entre 184 y 185, derivó en la apertura de una causa por tentativa de femicidio, incendio y amenazas, que tiene como imputado a Héctor Carrizo, de 60 años.

Por esos delitos la fiscal María Eugenia Di Lorenzo lo indagó por videoconferencia, para no violar la cuarentena, y se negó a declarar tras ser asesorado, por la misma vía, por sus abogados defensores Gustavo Galasso y Ezequiel Funes.

Allegados al imputado negaron las acusaciones, insistiendo en el argumento de que se trató de un hecho accidental y que las quemaduras que tiene Carrizo “son de brea”. Lo detuvieron en la casa que compartía con su pareja, dos hijos en común y otros dos que la mujer tuvo con otra pareja, luego de que varias declaraciones lo implicaran, informó un investigador. Luego lo trasladaron al hospital de Romero“porque tenía lesiones de quemadura en la cabeza y otras partes del cuerpo”, razón por la cual ahora están solicitando que le permitan “cumplir el aislamiento en la casa de su hija”, porque en “ese centro asistencial habría un caso de coronavirus”, dijeron desde la defensa. Según testigos de la relación y la propia víctima, el hombre había amenazado a Videla con prenderla fuego y el incidente del fin de semana sería como el presunto acto final de una sucesión de episodios de violencia que también dejó una última instancia en el que la víctima habría realizado un pedido de ayuda. “Fue a ver a una vecina antes del incendio, alrededor de las 8 y media de la noche. Necesitaba comunicarse con un hermano y ahí le dijo que su pareja le había pegado”, apuntó el investigador.

Esa declaración de la vecina se suma a las realizadas por otros frentistas de la zona y familiares de la víctima, que llevaron a los policías a redondear la idea de que el hombre “era violento con la mujer. Incluso, le había dicho que se fuera de la casa o la prendería fuego”.

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Esa trama complicó el cuadro inicial, instalado con el pedido de auxilio a los bomberos y un operativo que derivó en el traslado de la mujer al Hospital, en un patrullero. Los bomberos realizan peritajes que determinarán las causas y la dinámica de la escena. Por ahora, los investigadores pudieron reconstruir la escena con varias personas adentro de la vivienda cuando empezó el incendio. “Salieron todos corriendo. Entre ellos la víctima”.