Al final, el intendente de Castelli pudo entrar a Dolores a visitar a su hijo

Francisco Echarren fue autorizado a ingresar en el distrito vecino, después de la disputa con su colega, que le impedía el paso

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La novela que protagonizaron en los últimos días dos intendentes del interior bonaerense, por la decisión de uno de ellos de impedirle al otro entrar a su distrito a visitar a su hijo recién nacido, tuvo ayer un “final feliz”.

Después de fuertes reclamos y de tildar de “matón” a su colega, el jefe comunal de Castelli Francisco Echarren logró entrar a la ciudad de Dolores para visitar a su mujer y a su hijo recién nacido, internados en un sanatorio privado de ese vecino distrito.

Así lo informó el propio intendente ayer en sus cuentas de redes sociales, donde lejos de buscar bajar el tono continuó con las críticas hacia su colega de Dolores, Camilo Etchevarren, con quien mantiene un largo enfrentamiento por cuestiones políticas (uno es oficialista y el otro es opositor) pero también por cuestiones “vecinales” y limítrofes.

“Al fin pude estar con Floren”, comentó Echarren, en referencia a su bebé recién nacido, bautizado Florentino.

“Parece mentira lo que hicieron, pero nada me saca la felicidad del corazón de tener a este principito. Ver a tu hijo es algo muy simple. No es política. Gracias por los cientos de mensajes, de verdad mil gracias. Me hicieron bien”, escribió el intendente peronista en redes sociales, acompañado por una foto donde se lo ve dando la mamadera a su hijo.

La foto fue el final feliz de una polémica que se viralizó los últimos días en redes a partir de la denuncia de Echarren contra su par, el intendente de Dolores Camilo Etchevarren, a quien acusaba de haber montado un operativo especial para impedirle el ingreso desde Castelli a Dolores, donde su esposa dio a luz a su segundo hijo días atrás.

“Recién fui a Dolores a llevarle la leche a Florentino, que no toma la teta y tenía hambre. Y a la entrada me para la Policía y me dice que por orden del intendente Camilo Etchevarren no podía entrar a la ciudad por más que vaya a llevarle leche a su hijo recién nacido”, contó Echarren en un audio de WhatsApp.

“Así que justo pasaba un conocido, le di la leche para que la lleve al sanatorio para que Florentino se pueda alimentar y me volví a Castelli”, agregó.

En el audio, el intendente de Castelli también relata un supuesto operativo montado por su par para inspeccionar autos.

“Para mi sorpresa, me llama gente de la Policía de Dolores diciéndome que el intendente había hecho un despliegue alrededor del sanatorio y que mandaba a revisar baúles a la entrada para ver si yo pretendía entrar a Dolores en un baúl”, dijo Echarren.

Y cargó: “No sé cómo Dolores, que es una ciudad administrativa, que es sede judicial, de cierto vuelo intelectual, elige a este matón como intendente”.

PELEA CON ANTECEDENTES

Echarren y Etchevarren tienen una relación tensa no solo por diferencias políticas (el intendente de Castelli milita ahora en el Frente de Todos y el de Dolores en Cambiemos) sino por conflictos vecinales entre los distritos conectados por la Ruta 2.

Echarren fue el intendente que en pleno gobierno kirchnerista impulso el nombre del ex ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, a un barrio de viviendas en Castelli.

Pero con la llegada de María Eugenia Vidal a la Provincia, se acercó a Cambiemos y ocupó en forma efímera un cargo en el área de Infraestructura bonaerense.

Camilo Etchevarren, su par de Dolores, en tanto, es un dirigente de origen radical que durante algunos años abrevó en la Coalición Cívica que lidera Elisa Carrió.

Pero luego se alejó de ese espacio aunque se sigue moviendo bajo el paraguas de Juntos por el Cambio.

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