Inter, de Lautaro Martínez, se instaló en los cuartos de final

El Manchester United y el Inter de Milán accedieron ayer a los cuartos de final de la Europa League, en el regreso del fútbol continental en medio de la pandemia.

El United derrotó 2-1 al LASK Linz para completar un global de 7-1 sobre el conjunto austríaco, cinco meses después de que se jugó el partido de ida. El LASK tuvo la ventaja por dos minutos tras el gol de Philipp Wiesinger a los 55 minutos, pero Jesse Lingard no tardó en empatar por el United. Anthony Martial marcó el del triunfo a los 88.

En territorio neutral, el Inter, con la presencia de Lautaro Martínez, superó 2-0 al Getafe español con goles de Romelu Lukaku y Christian Eriksen. Fue el único cruce de octavos que se definió en un solo partido debido a que no se completó el duelo de ida al suspenderse la temporada europea.

Horas antes, el Shakhtar Donetsk y Copenhague también aseguraron su lugar en la siguiente fase.

Lukaku puso al Inter al frente con su 30º gol de la campaña. El delantero belga dominó un pase de Alssandro Bastoni a los 33 minutos, resistió la marca de un defensa y definió un potente disparo raso. Eriksen cerró la cuenta a los 84, al rematar un balón en el área apenas dos minutos después de ingresar.

Shakhtar, el campeón de la Copa UEFA en 2009, se impuso 3-0 en el partido de vuelta ante Wolfsburgo para sentenciar un 5-1 en el marcador global, cinco meses después de haber disputado la ida. El brasileño Junior Moraes firmó un doblete para el conjunto ucraniano.

Copenhague también ganó por 3-0 y el club de Dinamarca avanzó a los cuartos de final de un torneo europeo por primera vez, al voltear el 1-0 adverso de la ida ante el Basaksehir turco y certificó la victoria 3-1 en el global.

Shakhtar y Copenhague son los primeros equipos que acceden a los cuartos de final, que se disputará con el nuevo formato de torneo que la UEFA ha previsto durante la pandemia. Todos los cruces a partir de la fase de cuartos se jugarán en Alemania y serán a un solo partidos.

Se guardó un minuto de silencio previo a los partidos para rendir homenaje a las víctimas de la pandemia. No se realizó una manifestación conjunta sobre la injusticia racial, aunque los capitanes de los equipos lucieron cintas con la frase “No Al Racismo”.