El Peque superó un duro escollo y ahora va por más

Diego Schwartzman (15) tiene la necesidad de sumar puntos para tratar ingresar al ATP Finals de Turín, aunque por ahora parece ser algo lejano. Claro que conociendo al “Peque” no se dará por vencido nunca y lo demostró en su debut del Masters 1000 de París, donde tuvo que batallar dos horas y 58 minutos para eliminar al australiano John Millman (73) al imponerse por 7-6 (2), 5-7 y 6-2.

En tanto, Schwartzman buscará avanzar a los octavos de final del torneo parisino, que se juega sobre canchas de superficie dura y reparte 3.084.450 euros en premios, cuando hoy se enfrente con el estadounidense Marcos Giron (57) que derrotó a Frances Tiafoe (41) por 6-7 (5), 6-4 y 6-3. El partido se estará jugando no antes de las 14:30 (hora de nuestro país) y será televisado por la señal ESPN y sus distintas plataformas.

Como quedó dicho, el triunfo de Schwartzman no fue sencillo para el argentino, que inclusive tuvo que recibir asistencia médica. Fue en el segundo set, cuando estando 6-5 abajo en el marcador descargó su bronca al cometer errores en momentos claves impactando reiteradas veces la raqueta sobre el piso. Debido a este ataque de ira, el “Peque” se clavó una astilla en la mano por lo que ingresó el médico para hacerle las respectivas curaciones.

A lo largo del partido se registraron quince quiebres de saques, algo no muy frecuente en el tenis actual. Ocho de ellos sucedieron en el primer set. De los 12 juegos previos al tiebreak, solamente pudieron mantener su servicio en los dos primeros games y en el 4-2 (Schwartzman) y 4-3 (Millman).El segundo set tuvo cinco quiebres más. El primer game de servicio de Millman (2-0), el segundo de Schwartzman (2-1), el séptimo game (3-4), el octavo (4-3) y en la definición del mismo, Millman quebró a Schwartzman para ponerse 6-5 y luego cerró con su servicio.

En el tercero y decisivo tuvo dos quiebres, ambos a favor del argentino: en el segundo game (2-0) y en el cierre del partido para lograr el 6-2. Superada ese momento de fastidio consigo mismo, Schwartzman se tranquilizó y no tuvo problemas para superar al australiano.

En tanto, Novak Djokovic (1), que el lunes había regresado al circuito en un partido de dobles, volvió a jugar en singles después de la caída en la final del US Open y derrotó al húngaro Marton Fucsovics (40) por 6-2, 4-6 y 6-3.

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