VIDEO: Hizo volar su auto 0 Km, con dinamita por no estar de acuerdo en cambiar la batería

Un finlandés se negó a pagar 22.600 dólares para comprar una batería para su auto Tesla, que había comprado cero kilómetro.
En un taller de reparación de la mencionada marca, le dijeron al propietario de un Model S que reemplazar la batería costaría esa semejante suma de dinero. A cambio, y como protesta, decidió colocar 30 kilos de dinamita en el auto para hacerlo volar por el aire.

El finlandés Tuomas Katainen  es propietario de un Tesla Model S, cero kilómetro, a quien le aseguraron que tendría que pagar más de 22,600 dólares para reemplazar la batería de su automóvil.

Así, en situación de rebeldía a la realidad, decidió asociarse con un YouTuber para hacer explotar su Model S con 30 kilos de dinamita.

Según Katainen, su auto funcionó sin problemas durante las primeros 1.500 kilómetros. Pero luego comenzaron a aparecer los códigos de error. El cuadro de situación se reiteraba casi de manera constante, por lo cual, envió su automóvil al taller de reparación de un concesionario Tesla, donde permaneció durante aproximadamente un mes. La lamentable respuesta fue que no podían hacer nada por su automóvil nuevo. Su única opción sería reemplazar la batería, que costaría más de  22,600 dólares, y además, tendría que pedirle permiso a Tesla para realizar la reparación.

Para poner esto en perspectiva, 22,600 dólares, sería de gran ayuda para comprar otro Model S usado en Finlandia, que parece venderse por más de 42,900 . Así, decidió llevarse su vehículo para transformarlo en una bomba. Y para no sentirse solo, Katainen contó con la ayuda del YouTuber Pommijätkät , que se podría traducir como "Bomb Dudes". 

Finalmente. queda muy claro que volar un automóvil con dinamita resulta altamente peligroso, nada aconsejable y no es para nada una tarea sencilla. En este sentido, Katainen y Pommijätkät establecieron la operación en una cantera en Jaala, una pequeña ciudad rural en el sur de Finlandia. Asimismo, el grupo no dejó de considerar factores como la enorme ola de presión del explosivo y la dirección en la que iría la explosión para garantizar la seguridad.