Un colegio de Abasto, blanco del vandalismo

El último fin de semana, la Escuela Secundaria San Agustín de Abasto sufrió un robo y la comunidad educativa del establecimiento expresó su preocupación porque, además de los objetos de valor que les sustrajeron, los delincuentes provocaron destrozos en varias ventanas. “Todo se logró con mucho esfuerzo porque es una escuela sin subvención estatal y nos preocupa mucho, nos hace sentir vulnerables, pensar que algo así puede volver a pasar”, sostuvo Ariel Bonicatto, director de ese nivel educativo.

El colegio se encuentra en 515 bis y 210 y la primera en advertir ayer que las instalaciones habían sido violentadas fue la portera.

Según contó el director, ayer por la mañana al entrar al edificio junto a la secretaria, la portera les advirtió que habían entrado a robar.

“Es la segunda vez en el año que entran a robar, antes solo sufríamos ataques vandálicos, pero ahora ingresaron para buscar cosas de valor”, agregó el docente.

En mayo último los ladrones rompieron una ventana para ingresar a la dirección y se llevaron un ventilador y una pava eléctrica.

Cinco meses después los maleantes también fueron por lo ajeno y robaron las ruedas de la camioneta de un preceptor del establecimiento.

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En esta oportunidad parece que todo sucedió en la madrugada del domingo, ya que quedaron muchas marcas de pisadas embarradas. Los ladrones barretearon una ventana para forzar la abertura e ingresaron a la sala de profesores. Tomándose todo el tiempo que necesitaron pudieron desconectar un horno microondas y un dispenser de agua fría y caliente. También se llevaron una bolsa completa con material de Educación Física: conos, pelotas de vóley y de handball.

“También rompieron algunas ventanas de las aulas, pero ahí solo hay bancos y sillas, ni siquiera hay armarios, entonces siguieron de largo, no entraron. Nos preocupa que hayan podido tomarse todo el tiempo del mundo para sacar cosas que son grandes y pesadas”, sostuvo Bonicatto.

El docente expresó su preocupación porque a las 14 se retiran del establecimiento y ya no queda nadie. Solo algunos fines de semana personal de maestranza que vive cerca se da una vuelta para corroborar que todo esté en orden.

Las autoridades escolares radicaron la denuncia en la comisaría séptima de Abasto, tal como hicieron en mayo cuando sufrieron el otro robo.

El área de la escuela primaria también sufrió ataques y, entre otros, se recordó el que se produjo en la dirección cuando aparecieron pisoteadas las banderas argentina y papal.

En otras ocasiones los delincuentes desmontaron los flotadores de los tanques de agua y rompieron vidrios.

“La escuela secundaria no tiene subvención, las cuotas son caras y todo se hace con mucho sacrificio, recién este año logramos que cada curso tenga su salón, antes compartían aulas con la primaria; por eso todo esto nos duele mucho, nos hace sentir vulnerables”, señaló Bonicatto.

Si bien el área de dirección ya cuenta con una alarma, la idea es colocar más en otros ambientes del establecimiento, una medida que esperan que sirva para desalentar los robos. “Estamos cansados de ser el blanco de ataques, no queremos que nos vuelva a faltar nada, algunas cosas las teníamos gracias a la ayuda de donaciones, como era el microondas”, se lamentó el docente.