Cuatro modalidades especialmente nocivas

Edición Impresa

Aunque existe una amplia variedad de monólogos interiores, los especialistas señalan que hay al menos cuatro de ellos a los que conviene prestar especial atención

Monólogo de la preocupación

Es el que se da cuando caemos en pensamientos que nos enfrentan siempre al peor escenario, donde todo se percibe como amenaza y adversidad. La actitud vigilante en que nos pone termina generando angustia y estrés.

Monólogo de la autocrítica

Tiene lugar cuando empezamos a tener pensamientos de crítica y reproche hacia nosotros mismos por alguna decisión o accionar. Su amenaza consiste en que larga daña la autoestima y conduce a una constante insatisfacción.

Monólogo de la victimización

Es el que ocurre cuando no dejamos de pensar que todo lo malo que nos pasa se debe a nuestra mala suerte o a que el mundo está en contra nuestro. En consecuencia vivimos afligidos y nos damos por vencidos con facilidad.

Monólogo perfeccionista

Aparece cuando todas las ideas que cruzan por nuestra mente apuntan a hacer más cosas y mejor. Eso conduce a cargarnos de obligaciones, valorar más el deber que el placer y pasar por alto señales agotamiento físico y estrés.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE