El “alarmazo” sonó fuerte en Zona Norte

El sonido de las alarmas particulares y comunitarias se escuchó fuerte por City Bell, aunque también se extendió a otras localidades de la Zona Norte platense y también a Los Hornos. El reclamo es el mismo que se escucha cada semana desde hace al menos seis meses: seguridad para uno de los sectores de la Ciudad más atacados por la delincuencia. “Queremos que el Ministerio de Justicia nos oiga de una buena vez, esto no da para más y necesitamos que los jueces y fiscales cumplan sus funciones”, explicó María Eugenia Hernández, una de las organizadoras de la movida.

Mediante un comunicado que hicieron circular por las redes sociales, exigieron “basta de vecinos rehenes de malas decisiones, que deben cuidarse entre sí para ser sobrevivientes de un sistema que no funciona, donde los delincuentes tienen garantizados los derechos”.

Mientras tanto, en Villa Elisa y en City Bell los robos continuaban.

DOS CASAS Y UN CLUB

En Camino Belgrano entre 422 y 423, donde una familia tiene su casa de fin de semana, desconocidos burlaron el domingo por la madrugada la alarma del lugar e ingresaron sin ser detectados. Para hacerlo rompieron el alambrado perimetral y luego una ventana. El perro de una vecina ladró a las cuatro de la mañana y sospechan que fue a esa hora que ocurrió el atraco. “Revolvieron todo, parece que se llevaron muchas cosas”, reveló una fuente. En la esquina, sobre Belgrano y 423, sustrajeron una camioneta la misma noche.

En tanto, también el sábado pero entre las 13 y las 15 horas, delincuentes aprovecharon la ausencia de sus dueños para entrar en una finca situada en 461 entre 13c y 14. La modalidad fue similar: vulneraron una abertura y saquearon el interior del inmueble.

Por último, en el club Martín Fierro, donde asisten a unas 150 personas (40 familias), ladrones barretearon un ventiluz del establecimiento para sacar una garrafa. “Habíamos quedado en encontrarnos para trabajar en el club, llegó primero un vecino y vio que habían violentado una ventana”, contó Micaela Ferrer, presidente de la institución. Los malvivientes se llevaron una garrafa que usan para cocinar. Ferrer indicó que “en el barrio es terrible cómo han subido los hechos delictivos durante la pandemia”. Y dejó dos números de teléfono para hacer donaciones: 221-155739861 y 221-153161500.