En una ajustada votación, el Parlamento israelí destronó a Netanyahu como premier

En su lugar asumió el derechista Naftali Bennet, al frente de un gobierno de unidad nacional que aglutina a varias fuerzas

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JERUSALÉN

Israel abrió ayer una nueva página con un ajustado voto de confianza en el Parlamento (Knéset) que ungió a una “coalición de cambio” formada por rivales ideológicos unidos para echar del poder al primer ministro Benjamín Netanyahu.

El derechista Naftali Bennet, en una alianza que va de la izquierda a la derecha e incluye a partidos árabes, logró el voto favorable de 60 de los 119 diputados presentes (sobre 120 con que cuenta la Cámara), y 59 en contra, pertenecientes al Likud del saliente jefe de gobierno y a las agrupaciones de extrema derecha y ultraortodoxos.

Durante la sesión y antes de la votación, el centrista y líder opositor Yair Lapid y el jefe de la derecha radical Naftali Bennett presentaron su equipo de gobierno de la heterogénea coalición (compuesta por dos partidos de izquierda, dos de centro, tres de derecha y una formación árabe).

“Entiendo que no es un día fácil para muchos, pero tampoco de luto, es un día de cambio, de cambio de régimen en el marco de una democracia”, indicó el líder de derecha radical en su discurso ante la Knéset.

“Prometo que este gobierno trabajará para todo el país en su conjunto, nadie debe tener miedo”, agregó.

También advirtió que su gobierno no dejará que “Irán desarrolle armas nucleares” y “se reserva una absoluta libertad de acción” contra Teherán.

En su turno, el jefe de gobierno saliente Benjamín Netanyahu dijo al Parlamento que continuará en política y vaticinó que volverá “pronto” al poder.

“Si nuestro destino es estar en la oposición, lo haremos con la frente en alto, haremos caer a este mal gobierno y volveremos a dirigir al país a nuestra manera (...) ¡Volveremos pronto!”, aseguró.

Netanyahu, de 71 años, está siendo juzgado desde hace un año por presunta corrupción. Las protestas para pedir su dimisión se venían sucediendo, la última de ellas el sábado por la noche.

Frente a su residencia oficial en Jerusalén, los manifestantes no esperaron al voto en el Parlamento para celebrar la “caída” del “rey Bibi”, el apodo de Netanyahu, que fue jefe de gobierno de 1996 a 1999 y sin interrupción desde 2009.

La nueva coalición estará dirigida por Naftali Bennett, jefe del partido de derecha Yamina, durante los dos primeros años, y después por Yair Lapid durante un período equivalente.

Después de las últimas legislativas de marzo, la oposición se unió contra Netanyahu y sorprendió al conseguir el apoyo del partido árabe israelí Raam del islamista moderado Mansur Abas.

“El gobierno trabajará para religiosos, laicos, ultraortodoxos, árabes, sin excepción”, prometió Bennett, otrora cercano al mandatario saliente.

“La población merece un gobierno que anteponga el bien del país en sus prioridades”, agregó Lapid, quien está previsto se convierta en ministro de Relaciones Exteriores. (AFP)

 

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