Ángel Di Bella

Profundas muestras de pesar provocó el fallecimiento de Ángel Di Bella, caracterizado vecino que se distinguió por su espíritu emprendedor, sus modales ejemplares y su forma de ser abierta y bondadosa. Su partida enluta no sólo a sus seres cercanos, sino también a quienes lo conocieron a lo largo de su vida.

Había nacido en La Plata el 26 de agosto de 1931, en el seno de una familia conformada por inmigrantes italianos. Sus padres fueron Leonardo Di Bella y Juana y fue el tercero de cuatro hermanos.

Terminó la educación primaria en su querida Escuela Nº19 “General San Martín” de La Loma.

Desde muy joven comenzó a trabajar en la casa “Bellone Hnos”, donde fue muy apreciado y supo cosechar grandes amigos.

Más tarde, junto con su hermano, se dedicó al comercio del automóvil, durante 18 años, en calle 13.

Luego, en compañía de sus dos hermanos puso en marcha otro emprendimiento: montaron un negocio, “S.A.R”, dedicado a la venta y asesoramiento integral de elementos de la construcción.

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De carácter muy alegre y divertido, disfrutó de viajar y visitar a parte de su familia que reside en Italia, quienes siempre estaban presentes en sus relatos.

Fue uno de los pilares de la familia que consolidó con su esposa, Delia Soldi. Tuvieron tres hijos: Ricardo (abogado), Guillermo (martillero) y María Roxana (odontóloga), quienes lo acompañaron abnegadamente hasta sus últimos días. Sus adorados nietos -Pilar, Eugenia, Agustina, Lucía, Ángelo y Ágata eran la alegría de sus días.

Otro de sus placeres era diariamente concurrir al centro platense con sus amigos a disfrutar de una amena charla, café mediante.

Entre los rasgos de su personalidad que más valoraron quienes tuvieron la oportunidad de conocerlo, se mencionó que fue muy buen vecino, esposo, compañero y gran padre. Una persona respetuosa, respetada y honesta, un ejemplo que influyó con su forma de ser positiva a quienes lo conocieron y valoraron.

Su esfuerzo, perseverancia y claridad para trazar cada objetivo le permitieron concretar diversos proyectos que llevó a cabo en diferentes rubros comerciales.

Siempre con optimismo y mucho esfuerzo, se enfocó en cada propuesta que surgía tras realizar diversas evaluaciones sobre la viabilidad de cada emprendimiento que encaraba, siempre con el propósito de mejorar y potenciar los recursos con los que contaba.