César Augusto Morbidelli

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Docente de extensa trayectoria en la Región, César Augusto Morbidelli dejó su impronta en numerosas camadas de adolescentes que lo apreciaron por su sapiencia y bondad, por eso su fallecimiento conmovió distintos círculos a los que él se vinculó.

Hijo mayor de Herminia María Magdalena y César, había nacido en Ensenada, el 30 de enero de 1927 y creció junto a sus hermanos Enrique Mario y Héctor Oscar, en su casa de Sidotti y Don Bosco.

Completó su formación en la Escuela N°1 Bernardino Rivadavia, de Ensenada; en el Colegio Nacional y egresó de la Universidad Nacional de La Plata como profesor en Ciencias Biológicas y doctor en Ciencias Naturales.

Fue profesor fundador de la Escuela de Enseñanza Media N°1, de Ensenada, y se desempeñó por décadas en la Escuela Normal N°1 Mary O´Graham. Además fue profesor del Colegio Normal N°2 Benito Lynch y de la Escuela de Enseñanza Media N°1, de Berisso.

En cada uno de esos establecimientos educativos dio el ejemplo de un profesor apasionado por la docencia y comprometido con los temas contemporáneos. Para muchos jóvenes fue un gran referente, alguien de palabra autorizada a quien buscaban tener cerca.

Su figura constituyó toda una institución, por la solvencia intelectual que lo caracterizó, pero también por el cariño que él les tuvo a sus alumnos. Respondió a todas las muestras de afecto y nunca faltó a las cenas o reuniones a las que lo invitaron.

En su entorno fue recordado por su esencia pacífica y conciliadora; en sus vínculos no había lugar para esas críticas que, lejos de ser constructivas, resultan avasallantes.

En el tiempo libre le gustaba viajar, disfrutar de la lectura y, por sobre todas las cosas, de la naturaleza. También tenía gran afición por los documentales.

Para sus sobrinas María Lía, María Teresa y María Verónica, César Morbidelli fue una figura entrañable, alguien que las acompañó en cada etapa y disfrutó sus logros como propios. También se emocionó con los nacimientos de sus sobrinos nietos Marito, Bernardo, Francisco, Victoria, Pedro y Nicolás y de su sobrino bisnieto, Lorenzo.

De carácter afable y afecto a las reuniones, fue un hombre que se destacó por su humor e ironía. Sus allegados lo recordarán, sin dudas, como alguien que se ocupó de cultivar sus conocimientos, un hombre afectuoso e íntegro, un ser que en cada lugar supo entregar lo mejor de sí.

 

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