Violento raid delictivo en Zona Norte: atacaron a una mujer y dos comercios

Comenzó como un simple asalto callejero, no muy diferente a los tantos que ocurren a diario en la Ciudad. Los dos ladrones, que se acercaron a pie, ni siquiera debieron mostrar sus armas para robarle la camioneta a una mujer en la puerta de su casa de 461 y 12. Ella los vio cuando los tuvo encima: había ido a buscar una mochila que tenía en el asiento del acompañante de su Chevrolet Spin. Uno de ellos la miró y le dio una orden clara: “Dame el auto”. La víctima estaba sola y no dudó en entregar las llaves. Y, así como llegaron, los sujetos se esfumaron con el rodado.

“Fue una situación tan cotidiana como las que vivimos todos habitualmente”, lamentó la damnificada en diálogo con este diario. Eran las 19.10 del lunes, y lo que ella no sabía, ni nadie, era que la jornada laboral de los malvivientes acababa de empezar.

RÁPIDOS Y VIOLENTOS

A las 19.20 frenaron en la esquina de 13 C y 460, en la puerta del supermercado “Checo”. Bajaron ambos y no les importó que en ese momento hubiera un cliente que conversaba con el encargado. Se encaramaron hacia ellos, pero el vendedor advirtió que algo se traían entre manos y se apuró a cerrar la reja y bajar la persiana metálica. Enojados por la maniobra, los delincuentes la patearon en un vano intento por abrirla.

Después de algunos puntapiés, volvieron a la Spin y aceleraron por 13 C en dirección a 461. A mitad de cuadra, las luces de un local les llamó la atención. Lo pasaron “a fondo”, así que tuvieron que frenar y dar marcha atrás. Lo que siguió después fueron 20 segundos de terror.

“Parecían ninjas por cómo bajaron del auto. En ese momento le preparaba comida para gallinas a una mujer, pero además había un muchacho con el hijo de 9 años. Y el tipo fue directo al nene”, refirió Daniel Paz, dueño de la forrajería. Uno de los asaltantes permaneció en la vereda a modo de “campana”. Su cómplice, “un pibe de entre 20 y 25 años, muy flaco y de un metro setenta, entró a los gritos, muy nervioso y con el arma en la mano”, aseguró el comerciante.

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La violencia verbal fue una constante durante el lapso que duró el atraco. “Nos amenazó con que iba a arrancar a los tiros y a volarnos la cabeza a todos, y cada tanto se iba hasta donde estaba el chico, pero el padre lo abrazaba, lo cubría con su cuerpo y le pedía por favor que lo dejara llevarlo afuera”, señaló Paz. Al ver que la situación se ponía cada vez más tensa, el propietario del pet shop y el hombre le entregaron todo lo que tenían “con tal de que se fueran”, añadió.

Los ladrones se conformaron con el botín y escaparon. Detrás de ellos dejaron el miedo y la consternación. Daniel remarcó que “lo que más me preocupó fue el nene, porque el chorro lo buscaba siempre a él. A mí me robaron un montón de veces, ya sé cómo es esto, pero ahora fue distinto. Pensá que yo jamás cierro la puerta, vivo acá desde el año 90 y nunca tuve problemas. Desde hace unos ocho meses la cosa se puso brava”.

Ese mismo día, poco antes de las 20 horas, una joven de 20 años que trabaja como empleada en un autoservicio, fue sorprendida por dos desconocidos que sin mostrar ningún tipo de arma la redujeron, le robaron dinero en efectivo (unos 8 mil pesos) y varios paquetes de cigarrillos. En la calle, los esperaba un tercero en una camioneta Chevrolet Spin color gris.

Conforme indicó la damnificada, escaparon por 423 en dirección al Camino Belgrano.

Horas más tarde, la Policía dio con el rodado sustraído. Según confió la víctima, la abandonaron en la entrada del ECAS, prendida fuego. Por otra parte, cuando los pesquisas peritaron las imágenes de las cámaras de seguridad de la cuadra, descubrieron un detalle importante: una Peugeot 3008 que, a baja velocidad, pasaba por la escena del hecho dos veces, de la cual sospechan que se trató del “apoyo”.

Todo lo narrado forma parte de la cruda realidad que viven actualmente los comerciantes y vecinos de la Zona Norte, donde la inseguridad golpea con frecuencia inusitada. Ayer, por ejemplo, ocurrió otro raid en la zona del Centenario. 

EN TOLOSA, OTRO CASO

También el lunes, pero en Tolosa, un solitario ladrón fue repelido por la cajera de un supermercado. El episodio ocurrió a las 17.59 horas en un negocio situado en 19 entre 518 y 519 y, como los casos relatados antes, también quedó filmado por las cámaras de seguridad.

Las imágenes lo muestran mientras llega al lugar a pie. Antes de entrar saca un revólver plateado y en un instante toma a la joven del cuello de manera amenazante. Ésta, lejos de ceder, forcejea con él y lo obliga a huir a la carrera sin poder consumar el robo.