En su versión más extrema, la epidemia de violencia callejera se cobró otra vida

Un hombre de 44 años murió en un hospital tras ser apuñalado por otro pasajero en un micro de la línea 152, en capital federal

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Una discusión ordinaria, el filo de un puñal y la muerte. Así podría resumirse el crimen de Franklin Bedón Galarza (44) a manos de Juan José Báez (39), ocurrido el lunes último en el barrio porteño de Palermo en el interior de un colectivo de la línea 152. Báez está detenido, se lo indagará por homicidio, y en las próximas horas será sometido a nuevos peritajes psiquiátricos y psicológicos para establecer si es o no imputable de ese cargo.

Bedón Galarza había sido trasladado a un hospital con el cuchillo de carnicero aún clavado en el abdomen.

El hombre se recuperaba tras ser sometido a una cirugía, pero su cuadro empeoró y murió ayer.

El imputado, que tiene antecedentes penales por “resistencia a la autoridad y robo” (en 2017), se negó a declarar la primera vez, cuando lo acusaron de la “tentativa de homicidio”.

El hecho ocurrió el lunes, a las 19.30, a bordo del interno 56 de la línea 152, cuando Báez se subió sin pagar y se ubicó muy cerca de una pareja.

Un vocero policial explicó que en ese momento Bedón Galarza salió en defensa de esa pareja, le dijo a Báez que mantuviera la distancia y así se inició una discusión que culminó cuando el ahora detenido extrajo un arma blanca y lo apuñaló.

El agresor bajó del colectivo e intentó escapar, pero el encargado de un edificio de la cuadra lo interceptó y lo retuvo con ayuda de otros vecinos hasta la llegada de la policía.

El hecho se encuadra en un contexto social general, en el que la violencia extrema “de la calle” se coloca como una situación cada vez más frecuente. Aún en casos sin final trágico, como se vio en La Plata esta semana: el miércoles, un hombre viajó en el capot de un Renault Clío unas dos cuadras luego de un intercambio verbal con otras personas.

El episodio tuvo lugar en 49 entre 2 y 3, y el rodado circuló por momentos a una “velocidad preocupante”, según refirieron voceros oficiales. Tiene un antecedente fatal reciente en Ciudad Evita.

En esa localidad del conurbano bonaerense, en abril pasado, un joven murió tras las graves lesiones que sufrió al caer al asfalto luego de treparse al capot de un auto y ser llevado a gran velocidad por una conductora con la que había discutido previamente por un choque.

También cabe recordar el salvaje crimen del taxista Jorge Gómez (52), del que mañana se cumplen dos años, quien tras abrir la agencia “Taxi Rinn” y atender el primer llamado, se subió a su Chevrolet Corsa y se topó con un violento en 126 y 50. Una seguidilla de casi 20 trompadas y patadas, propinadas por Esteban Pérez Zablocky (27) lo dejaron malherido.

Más cerca, un siniestro vial ocurrido en mayo en City Bell tuvo de todo, hasta golpes de una de las implicadas. Todo sucedió en 474 y 19 y una cámara de seguridad de una casa captó lo ocurrido.

En el video se ve a un Fiat Palio que es embestido por un Ford Ka que iba por 19. El Palio se incrustó en las rejas de una casa, y su conductora se bajó para discutir con la conductora del Ka.

La pelea no terminó peor por la rápida intervención de los vecinos.

 

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