Después de sufrir tres robos en su carnicería, planea mudarse

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Un carnicero del barrio El Mondongo no duda en declarar su hartazgo e intenciones de mudar su comercio a otra zona “más segura” de la Ciudad, si es que eso existe. Es que en pocos días sufrió tres robos, uno de ellos en las últimas horas, con pérdida de mercadería, recaudación y dinero que tuvo que invertir en reparar la persiana que los intrusos le forzaron.

Por el caso fueron detenidos dos adolescentes, que, por su edad, son inimputables y ya regresaron con sus familias: tienen 14 años, según la Policía.

El hecho ocurrió ayer a la madrugada en el local de “La Vaca Tuerta”, en 2 esquina 69, donde los delincuentes primero forzaron la persiana, luego rompieron un vidrio y una vez adentro robaron muchísima mercadería y el dinero de la caja.

Los vecinos accionaron la alarma vecinal y esto los puso en fuga pero el daño ya estaba hecho. Los patrulleros que llegaron minutos después salieron en busca de los ladrones con datos que aportó un testigo y el apoyo de las cámaras de Monitoreo, logrando localizar en la rambla de 72 entre 3 y 4 a dos adolescentes que escaparon corriendo al ver las luces azules de los móviles.

“En la fuga descartaron una bolsa negra que contenía carne”, informaron fuentes oficiales. En 1 y 73 lograron interceptar a uno. El otro cayó en 73 y 117. Y ambos terminaron en la Novena, donde se constató que por su edad debían ser liberados de inmediato, previa intervención de la UFI del fuero de Responsabilidad Penal Juvenil en turno.

“Es el tercer robo en 10 días y del mismo modo”, lamentó en una charla con EL DIA Ricardo, el dueño del local, “arrancan la persiana y se llevan la mercadería que está a mano. La semana pasada nos hicieron un desastre y la otra también. Yo vivo a mitad de cuadra y me avisaron los vecinos a las 2.30 de la madrugada”.

Ricardo no es un “recién llegado”, ni en el barrio, ni en su trabajo. Hace 52 años que tiene este negocio, aunque para él son nuevas estas ganas de mudar su comercio a otro barrio.

Es que “encima del robo hay que arreglar la persiana que es un gasto extra, no hay nada barato. El barrio ahora es muy inseguro. La semana pasada robaron a dos chicas que iban en bicicleta, todos los días se entera uno de un robo nuevo. La policía se ha portado muy bien y pudo detener a uno de los ladrones, hasta apareció una bolsa con carne, pero son menores de edad”, concluyó el carnicero.

 

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