Se presentó en la comisaría el acusado de atropellar, matar y huir en Olmos

Una familia de Melchor Romero vive sus horas más dramáticas tras la muerte de un joven de 25 años que ayer a la madrugada se juntó con amigos y cuando intentaba cruzar la calle fue atropellado por un auto que ni siquiera frenó para ayudarlo.

Además de un pedazo de paragolpes, quien iba al volante dejó tirado en el lugar a Matías Alejandro Ovando (25), rodeado por amigos que, en shock, empezaron a pedir ayuda a gritos. El joven fue trasladado de urgencia al hospital Alejandro Korn, pero murió poco después de su arribo, cuando los médicos intentaban reanimarlo, informaron fuentes judiciales.

El acusado, de 30 años, se presentó anoche ante la Justicia pero no quedó detenido. Según declaró y consta en el parte policial, viajaba en un Mini Cooper S y "de repente se encuentra a un grupo de personas caminando por el medio de la calle" por lo que "realiza una maniobra para no colisionarlos, pero igualmente escucha el estallido del vidrio del conductor y continúa su marcha". Además explicó que no frenó "porque entró en pánico y tuvo temor de tener alguna represalia por parte del grupo de personas ya que desconocía si había lesionado alguna persona".

Asimismo se informó que se realizó la pericia sobre el vehículo y fue convocado a una audiencia para esta mañana. Cabe resaltar que los testigos recordaban haber visto un auto gris o blanco, probablemente un Volkswagen Fox. Es por eso que pidieron a aquellos que puedan suministrar alguna información comunicarse con el teléfono 221-4202685.

“MARCAS DE FRENADA”

El trágico episodio sucedió poco después de de las 5 de la mañana de ayer en 203 entre 37 y 38, por donde Ovando caminaba con tres amigos. “Estaban por cruzar la calle y este auto lo atropelló a Matías”, dijo ayer a este diario su padre, Aldo, antes de confirmar- con la voz quebrada- que una ambulancia lo trasladó al hospital de Melchor Romero, donde murió mientras los médicos lo asistían. Por lo que contaron los testigos, el auto implicado es de color blanco o gris. “Necesitamos ayuda para encontrarlo”, destacaba anoche Aldo, previo a que el acusado se presentara en la Justicia.

Tras la muerte del joven, y enterados del caso por la notificación del hospital, policías de la zona acudieron al Alejandro Korn y se entrevistaron con los familiares de la víctima. Enseguida, y a instancias de la UFI 10 que instruye la causa, se dirigieron al lugar que los amigos del joven indicaron como escena del embiste, encontrando varios elementos que lo confirmaron

“Había partes de plásticos de un vehículo y vestigios de ópticas”, se conoció de fuentes oficiales, “no observándose vehículo alguno, solo esos restos, marcas de frenada, una lata de cerveza y una zapatilla”. Los policías preservaron ese sector y convocaron a los peritos de Policía Científica, que se ocuparon de relevar toda la información de interés para esclarecer el caso.

La zona donde ocurrió el embiste es descampada, con terrenos de producción agrícola, pero ninguna cámara cerca. De cualquier modo, los pesquisas recorrieron los alrededores en busca de algún dispositivo privado o más testigos.

La fiscalía 10 de Delitos Culposos, a cargo de la instrucción de la causa, pidió algunas medidas periciales concretas, entre ellas la autopsia al cuerpo, y ordenó caratular las actuaciones como “homicidio culposo”.

EN LAS REDES

A Matías Ovando, sus amigos y allegados le decían “Chino”. Según contó su padre, trabajaba como mozo y barman en un salón de fiestas. Y era muy querido en la zona de Romero donde vivía con su familia.

La tragedia que sacude a todos ellos se replicó en las redes sociales, por donde circulaba desde ayer la foto de Matías, el lugar exacto donde lo atropellaron y el teléfono con el que se pueden comunicar todos los que puedan sumar algún dato.

“A las 6 de la madrugada fue atropellado por un auto gris o blanco que le falta un pedazo de paragolpe y se dio a la fuga a 44. Necesitamos información”.