Condenan a un pai umbanda pero sigue libre

El abusador sometió por más de 10 meses a la menor en una casilla de la calle 898 al 1200 de San Francisco Solano. Para los jueces se acreditó la responsabilidad penal luego de los dichos de la propia víctima que relató que «por medio de su familia había conocido al pai y que este le había dicho que si no accedía a los abusos, a sus hermanos le podría suceder algo». El imputado Daniel Jara se valió de mentiras y manipulaciones para someter a la víctima.

Ante los jueces Gustavo Farina, Juan Mata y Federico Merlini del Tribunal Oral 5, la víctima contó con detalles todo los abusos de los que fue víctima bajo amenazas de pae. Asimismo, los médicos convocados al juicio precisaron que la mujer tenía lesiones de vieja data.

Por testimonios de varias de las familiares de la víctima, se tomó conocimiento que Jara abusó sexualmente también de otras mujeres, bajo la misma modalidad de amenazas y manipulación a partir de sus tareas como líder religioso y alertando a las jóvenes que «si no accedían sus familiares tendrían desgracias».

Una de las testigos relató que el pai abusó en «tres o cuatro oportunidades» y que ella acudía a la vivienda ya que su madre tenía «cáncer y que el pae le dijo que si mantenía relaciones su madre se curaría».

Por un planteo del defensor, el pai umbanda continúa en libertad a pesar de la condena.

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