Coti: “Busco la mayor cantidad de felicidad por día”

Coti vuelve a La Plata: “con toda la banda”, avisa el artista que, en plena pandemia, visitó la Ciudad para presentarse en el fugaz autocine, traerá al Coliseo Podestá esta noche, desde las 21, el espectáculo que viene presentando en su gira por Argentina. “Un repaso extenso de los discos”, avisa, donde no faltarán esas canciones de su cancionero que ya son parte del lenguaje popular.

“Son canciones que tienen que estar, lo vemos en todos los conciertos que vemos de gente que admiramos: son canciones que tienen que estar en el concierto, revisitadas, obviamente, no hacemos las mismas versiones que hace 15 años, hacemos versiones que nos diviertan, que se adapten al concierto”, cuenta en diálogo con EL DIA sobre sus éxitos el autor de “Nada fue un error”, “Antes que ver el sol” y “Color esperanza”, entre otras.

Esas estarán, infaltables, mechadas con canciones “del fondo del armario”, los deep cuts que a Coti “me gusta revisitar, aunque no sean tan conocidas”. Porque, explica, “uno escribe canciones, no es que escribe éxitos. Uno escribe canciones y después lo que ocurra se verá”. Entonces, le tiene el mismo cariño a temas que quizás no consiguieron ese reconocimiento en la audiencia, pero que fueron creadas con el mismo amor.

De las otras, dice, son éxitos “orgánicos, sin ninguna campaña de marketing, que sobreviven de generación en generación”. ¿De dónde vienen? “No lo sé”, se ríe. “Siempre me he abocado a una búsqueda de la canción pura, más allá de los estilos: no soy afín a ningún estilo. Siempre fui un hacedor de canciones”, intenta explicar. “Uso los mismos elementos que usamos todos, las mismas palabras, los mismos acordes. En todo caso, busco mi manera, que tiene que ver con mi forma de comunicar”.

Ya han pasado más de tres décadas desde que Coti comenzó a andar su camino musical en Rosario: desde entonces, además de tocar, escribir y producir para varios próceres del rock y pop nacional, Coti ha escrito cientas de canciones, una carrera que mostró en el concierto “bisagra” que realizó en el Teatro Colón en 2019, “una experiencia alucinante en uno de los mejores teatros del mundo. Como artista, son esos conciertos que te marcan, que te definen. Una llegada y un punto de partida”.

El recorrido por su carrera fue grabado para DVD y disco, y ese es el último trabajo que ha presentado Coti desde entonces, aunque, confiesa, está trabajando en un nuevo disco de estudio. “Ya está listo el primer avance. Las canciones que fuimos sacando como singles no van a ser parte del nuevo disco”, adelanta Roberto Fidel Ernesto Sorokin Espasa, que sigue apostando al álbum a pesar de que los últimos lanzamientos fueron singles.

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“En un momento lo intenté, sacando singles, pero extraño sacar un disco. Podría haber seguido sacando canciones sueltas, pero preferí volver al formato del disco, sentir que estoy trabajando en una obra, en una obra más conceptual, a lo largo de varios años. Por eso, sacar un disco era una necesidad”, dice Coti.

El primer adelanto saldrá cuando termine el Mundial, se ríe, aunque también, cuenta el artista, el disco permanece a la espera del final de la gira: “Decidimos hacer esperar el disco, antes que hacer esperar los conciertos. Todo el equipo necesitaba volver al escenario, volver al trabajo, recuperar lo que se perdió no solo en términos materiales sino también anímicos, de recuperar esa necesidad fisiológica que tenemos los que trabajamos en los conciertos. Yo soy un músico del vivo. Lo necesito, me gusta, me mantiene vivo, valga la redundancia”.

A eso se dedicó en este 2022 Coti, que giró por Europa y Argentina en una extensa gira que va llegando a su final, un tour “muy intenso” que lo llevó a tomar la decisión de postergar la creación del disco. “Es que cuando uno es solista lleva gran parte de la carga de los conciertos”, lanza, y cuando son “cinco, seis, siete conciertos seguidos, en una o dos semanas, hay una cuestión física y psíquica que hay que cuidar, para poder rendir y disfrutar: si uno empieza a estar ofuscado, mal psicológicamente… ya dejás de disfrutarlo. Eso lo dejo para otro momento de mi vida”.

En ese sentido, Coti sostiene que “hay que marcar prioridades”, porque “además, también está la vida, los hijos, los padres, la pareja… En estas épocas de mucho trabajo, para congeniar todo hubo que marcar prioridades, y por eso la prioridad fue volver al escenario”.

De la misma manera, elige, a esta altura de su carrera, correrse del juego mediático: en pareja con Cande Tinelli, con quien se separó en un momento de este 2022 y con quien ahora pusieron fecha para casamiento, Coti dice que “uno tiene que preservarse uno, yo lo aprendí hace muchos años. Si uno está pendiente de las demandas de los demás, sea público, hater, familia, amigos, es imposible: uno tiene que elegir a qué demandas responde”.

“Hoy en día, con todos los canales de demanda que hay, si uno responde constantemente… olvidate, sos boleta. Tenés que saber preservarte, a qué demanda ponerle luz, y a cuáles mantener en la sombra”, reflexiona el rosarino. Por eso, da menos entrevistas. Y se aboca al trabajo.

“Tengo que ser selectivo. Y no uno como artista: cualquier persona, si se descuida, está todo el tiempo respondiendo mensajes de WhatsApp inútiles. Hay que saber seleccionar, hoy hay que elegir más que nunca, qué consume, qué demandas responde”, sigue Coti. “Es difícil, porque la estimulación es constante, estamos conectados las 24 horas, con los que están lejos y los que están cerca… Nos conectamos con cientos de demandas por día, y no con lo que está cerca, con las demandas nuestras, las demandas de nuestra gente querida”.

Coti habla desde una evidente madurez. A los 49 años, afirma que si bien “siempre llevé una vida tranquila, comunico lo que quiero comunicar y trato de que eso no se manipule… a veces es imposible”. Pero que ha aprendido y “estoy siendo muy feliz, con mi trabajo, con mi pareja, con mis hijos: estoy consiguiendo ese equilibro que es la búsqueda de cualquier persona, más allá del artista”.

“Cuando uno disfruta lo que hace”, concluye, “el que recibe eso también lo va a disfrutar. Así que estoy en esa búsqueda constante, buscando la mayor cantidad de felicidad por día”.

“Nos conectamos con cientos de demandas por día, y no con lo que está cerca, con las demandas nuestras, las demandas de nuestra gente querida”