Un 8vos de final dolarizado por demás para verlo en el estadio

Matías Marcilese

Desde Doha

El desembarco argentino en Doha es cada vez mayor de la mano de una ilusión que crece exponencialmente. Por cada barrio que uno camine, en el metro, en los colectivos, siempre hay uno o más argentinos con sus camisetas esperando el choque ante Australia. Queriendo saber si Di María será o no de la partida, averiguando cómo hacer para llegar al estadio Ahmen bin Ali que será sede de los 8vos de final ante los Socceros. Pero hay una pregunta que se repite a lo largo de los días posteriores al encuentro con Polonia. ¿Tienen entradas? Nadie se quiere perder el duelo de hoy, pero son pocas las entradas que hay disponibles. En horas de la tarde qatarí de ayer viernes, aparecieron en la web oficial de FIFA varios tickets y rápidamente se agotaron. La casa madre del fútbol mundial no sigue un patrón acerca de la venta de entradas, sino que mágicamente sube tickets sin necesidad de avisar con anterioridad. Los grandes ganadores son los que están atentos a un refresh y pueden “pescar” alguna. Lógicamente en los grupos de Whats App la noticia corre rápidamente y cada argentino que está en Doha, detiene su andar o lo que esté haciendo para conseguir un lugar con wifi y refrescar la página tantas veces pueda para lograr tener el tan ansiado pase al estadio Ahmen bin para hoy a las 22 hora de Qatar, 16 horas argentina.

Por supuesto que los privilegiados que lograron conseguir su ticket de forma oficial están en modo tranquilidad aguardando el match. El resto busca por cada rincón de la ciudad. En el Souq Waqif, donde todavía quedan muchos árabes saudíes, que quizás habían comprado un 8vos de final para el ganador del grupo C, en Corniche o West Bay que aún quedan mexicanos dando vueltas pero ya eliminados. Se buscan a los aztecas porque seguramente confiaban en su selección y podrían tener el 8vos que enfrenta argentinos y australianos.

Pero vayamos a una de las cosas más importante que son los precios de esas entradas tan anheladas. En la página FIFA, los costos oscilan entre 200 y 275 dólares depende si es categoría 1, 2 ó 3. Si bien es costoso al cambio con pesos argentinos, la realidad es que todo argentino en Doha firmaría con urgencia ese precio. Vayamos a lo que abunda en todos los mundiales y este, por más que sea en pleno desierto qatarí, no es la excepción. La reventa. Para el partido que Argentina jugó con México hubo casos en los que se pagaron 1.200 dólares, es importante tener en cuenta que si bien el estadio de Lusail tuvo 88.000 espectadores sentados, la demanda fue similar a la de una final mundial con mexicanos y argentinos en gran número aquí. Cuando Argentina jugó ante Polonia en el 974, la demanda polaca no era mayor, pero el estadio (que será desmontado al finalizar el Mundial) tiene un aforo para 44.000 personas. Para ese decisivo choque que definía el grupo C se pagaron entradas en 800 dólares, pero también se consiguieron por 500. Los números son muy dispares teniendo en cuenta el cuello de botella que se forma a medida que llega la hora del partido y la desesperación crece. Para el partido de hoy ante Australia en las calles de Doha se ofrecen con diferentes precios de acuerdo al lugar donde uno esté. En las coquetas y privadas playas de B12, se ofrecen a 800, 900 dólares, y mientras tanto hay muchas preguntas pero son menores las ventas. A medida que se acerque el horario del partido y nos acerquemos al estadio, ahí veremos si algún fanático tuvo suerte y pudo conseguir algo más económico por el apuro del vendedor, o si finalmente los precios se acercarán a los mil dólares como pasó en el duelo ante México. Más allá del dinero, que es muchísimo, lo que se respira es mucha ilusión y ganas de vivir este Qatar 2022 desde adentro, nadie quiere perderse este 8vos de final, muchos ya sueñan y hacen cuentas para cambiar vuelos de regreso. Todo impulsado por una Scaloneta que desplegó su mejor juego ante Polonia y no quiere despertarse de su sueño tan anhelado aquí en Doha.

Ante México hubo reventa de entradas y los hinchas llegaron a pagar hasta 1.200 dólares