El lago del Bosque y su historia de los tres teatros

Entre las historias de las que poco se habla en la Ciudad, con presencia de patrimonios del pasado y el presente, como el descuido y la polémica, aparece la del teatro del lago del Bosque. En rigor, lo que hoy sigue en proceso de deterioro en medio de un litigio judicial entre la Provincia y el Municipio, es el tercer complejo que contiene la isla de ese espejo en los 140 años de vida de la Ciudad.

Los que podría presentarse como la historia de los tres teatros, aparece desarrollado en una pesquisa del investigador en temas históricos de la Ciudad, Roberto Abrodos. “En 1911, por decisión del gobernador de la Provincia, General José Inocencio Arias, mediante una ley se autorizó a invertir la suma de 150.000 pesos para la construcción de un pabellón de verano y un nuevo Teatro en el Bosque. Si bien hasta 1912 continuó funcionando en la isla el primer teatro, se inicia en 1913 la demolición y en ese lugar comienza a construirse el nuevo teatro”, señala Abrodos en un trabajo.

Según el relevamiento del investigador, la renovación de todo el paseo lo sufrió la forestación, ya que se necesitó espacio y todo demandó “gran talado” de árboles.

Por aquellos días, al nuevo teatro se lo veía como dueño de adelantos tecnológicos y una identidad que nada tiene que ver con lo que había antes ni con lo que se ve hoy. “Un edificio con una altura que oscilaba entre los 10 y 12 metros, las imágenes que quedan de él lo demuestran. El Teatro estaba completo para el año 1915, aunque ya en 1914 había sido inaugurado parcialmente como cinematógrafo con lo cual se necesitó ampliar el presupuesto”, relata Abrodos.

Siguiendo con sus comodidades y equipamiento, el trabajo detalla que la nueva sala tenía una capacidad para 500 espectadores, con butacas, plateas y palcos, además de los correspondientes sanitarios.

Decadencia, radio y abandono

Del entusiasmo que supone la novedad se pasó al olvido en poco tiempo, según el investigador. El nuevo complejo, “funcionó hasta principios de los años `30. Luego, comenzó su decadencia y posterior abandono. Se trasladó a sus instalaciones el servicio de radiodifusión LS11 Radio Provincia, que primeramente transmitía desde el Pasaje Dardo Rocha”.

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Finalmente, luego de tener sus estudios en el Teatro Argentino, Radio Provincia se trasladó a su actual emplazamiento en la esquina de 11 y 53, apunta Abrodos.

Ya en soledad, “el mantenimiento del Teatro del Bosque resultaba insostenible y ante su lamentable estado se decidió demolerlo”. En términos relativos, la cuenta indicaría que no pasó de dos décadas la vida de aquel portento de la arquitectura.

Según los registros que consultó el investigador, hubo varios intentos de devolver arte al Bosque. Por ejemplo, con un teatro griego, pero no prosperó y hacia 1947 se volvió a la idea del emplazamiento sobre el islote del lago, dando origen al proyecto del Anfiteatro Martín Fierro.

El día de la ciudad, nuevo intento

Finalmente, en el espectáculo del 18 de noviembre de 1949 en la víspera de un nuevo aniversario de la ciudad se inauguraba el anfiteatro con una función de Ballet y música clásica.

Recuerda Abrodos que se interpretaron la farsa coreográfica “El Barbero de la esquina” de Aurel Millos y exposiciones coreográficas y escenas de la ópera “La Dolores” de Tomás Bretón, con una orquesta dirigida por Armando Di Giovambattista.

En los últimos años, tras la cesión en 2016 del complejo al Municipio, se mantiene un litigio judicial por la propiedad. Con el cambio de autoridades en la Gobernación, en 2019 la Provincia postula la nulidad del acto. Desde hace una década no hay espectáculos y está cerrado por el mal estado de sus instalaciones.

El teatro al aire libre “Martín Fierro”, tiene un pórtico de acceso de estilo romano y un paseo arbolado delimita el sector de plateas.

El segundo teatro también se equipó como sala de cine. Tras dos décadas fue demolido

El complejo tiene capacidad para albergar 2.400 espectadores. En tanto, las dimensiones del escenario son de 10 metros por 10 metros y está equipado también con sala de proyecciones, 20 camarines y oficinas administrativas.

En su esplendor, el Teatro fue vecino de otra infraestructura prácticamente desaparecida: un campo de deportes con piscina, canchas de tenis, vóley y un polígono de tiro.

El sector de acceso sobre la calle Nicolás Cúccolo se llama plaza República de Francia.

Así mismo se designó en 1960 con el nombre de Juan Prossi, la calleja del Paseo del Bosque que, partiendo desde las calles 57 y 115 (al fondo del colegio industrial Albert Thomas), circunda el campo de deportes del Club Estudiantes de La Plata y desemboca en la Avenida Iraola, frente al portón principal de entrada al Jardín Zoológico.