El cambio de intérpretes lo liberó y ayudó a ganarlo en el complemento

Como tantas otras en su historia con la Copa Libertadores de América, la de ayer no fue una noche fácil para Estudiantes, que pese al ajustado y agónico 1 a 0 con el que se fue al entretiempo, le costó quebrar la seguridad y el planteo de Audax Italiano. Ante esto, Ricardo Zielinski metió mano en el complemento y rápidamente mandó a la cancha a Franco Zapiola y Manuel Castro en lugar de Matías Pellegrini, de buena prestación, y de Gustavo Del Prete, otra vez bastante lejos de lo mejor que puede dar.

Y a partir de esas modificaciones, con el de Magdalena y el de Durazno bien abiertos por los costados, el León encontró su mejor fútbol, ya en un 4-4-2 más clásico.

En la primera en que se combinaron, Zapiola reventó el travesaño con un tremendo zurdazo, y en el rebote, Castro no pudo de cabeza. No obstante fue un aviso de lo que se vendría más adelante.

Su ingreso en conjunto no solo generó una preocupación para un rival que se mostraba cómodo en el trámite del partido, sino que liberó a Fernando Zuqui, que tampoco había tenido una buena primera mitad; y en más de una ocasión ha demostrado ser clave en el funcionamiento Pincha.

Y tal fue el impacto de los cambios en el partido, que el propio Manu Castro terminaría siendo el ejecutante del córner con el cual Leandro Díaz le pondría justicia al marcador para el 2 a 0 a poco del final del encuentro.

Ahora, ante esto, se abre una duda para el Ruso Zielinski, que ya dijo en conferencia querer tener siempre en cancha a los que tienen gol; por eso el interrogante es el siguiente ¿seguirá apostando por Del Prete en un sector en el cual parece no sentirse cómodo y muy lejos de donde realmente puede pesar en el campo?

Al mismo tiempo, se vienen partidos complicados por el torneo local (Vélez, Boca y el clásico ante Gimnasia), y en el medio los dos juegos frente a Everton de Chile por la Copa Libertadores, y el DT tendrá que ir rotando.