Ante las bajas en Unión, Munúa deberá meter mano en el equipo

Unión, que atraviesa una racha de lesiones, visitará el sábado al Lobo, por la duodécima fecha de la Copa de la Liga Profesional, con el seguro regreso de Franco Calderón, quien fue preservado en el encuentro ante San Lorenzo.

La vuelta del zaguero, por Brian Blasi, es una buena noticia para el equipo que dirige el uruguayo Gustavo Munúa, que viene muy golpeado por la lesión de Gastón González, afectado ante el “Cuervo” de la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. González debía viajar el 4 de mayo a Estados Unidos para ser presentado como el nuevo jugador del Orlando City en la MLS. La venta se había realizado en $3.2 millones de dólares, por el 80% del pase.

Para reemplazarlo, el técnico tiene a disposición la alternativa de Kevin Zenón, que tiene características ofensivas, pero también al marcador lateral Lucas Esquivel.

Otro de los interrogantes respecto a la formación que se presentará en el Bosque pasa por el ataque, ya que se probará a Leonardo Ramos, quien está fuera del equipo por una distensión del bíceps femoral del muslo derecho y según el último parte médico ya está realizando trabajos de campo.

En caso de llegar Ramos en condiciones, saldría del equipo Mariano Peralta Bauer, en un intento del técnico por dotar de mayor peso ofensivo a un equipo que no ha podido suplir al uruguayo Jonatan Álvez, todavía afectada por un esguince de articulación en el empeine del pie izquierdo.

Unión, que viene de dos derrotas consecutivas (Racing Club y San Lorenzo), necesita volver al triunfo para sostener sus aspiraciones de clasificar, ya que por el momento marcha en el sexto lugar, a un punto de Defensa y Justicia, el último clasificado. El equipo de Munúa no volverá a Santa Fe luego de enfrentar al Lobo por el torneo doméstico y el entrenador quiere tener a disposición a su figura para un partido clave por la Sudamericana ante Fluminense.

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