¿Qué hubiera pasado si...?: personajes icónicos del cine que casi fueron interpretados por otros actores

La historia del cine está llena de directores y productores que lucharon para conseguir el elenco que querían, que, convencidos de su visión, no flexibilizaron su mirada e insistieron. Pero también hay de las otras historias: actores que no eran los elegidos para roles que los terminaron marcando a ellos... y también a la historia del cine.

Y sin dudas, el más famoso de estos casos de “segundas opciones” que resultaron icónicas es el de “The Matrix”: Will Smith decidió hacer “Wild Wild West”, que resultó ser un gran fracaso, en lugar de la película de las Wachowski, que marcó una era. “Esta es una de esas historias de las que no estoy orgulloso, pero es la verdad. Rechacé a Neo en ‘The Matrix’”, contó el propio actor en un vídeo. La idea de la película que le trasladaron en la reunión no acabó de convencerle y decidió hacer el otro título. “No estoy orgulloso”, aseguró, “pero… Keanu estuvo perfecto. Laurence Fishburne estuvo perfecto”.

Así que “el elegido” no fue “el elegido” del estudio de “Matrix”. De hecho, después de Smith, también buscaron a Brad Pitt y Nicolas Cage. “Pasé de Matrix. Tomé la pastilla roja”, contó el galán rubio, mientras que Cage dijo que no por motivos personales. “Rechacé ‘El Señor de los Anillos’ y ‘Matrix’ porque no quería ir a Nueva Zelanda durante tres años o a Australia durante tres años porque necesitaba estar en casa con mi hijo Weston, eso es un hecho”, dijo el actor.

También, según han reportado diversos medios, los productores de “The Matrix” pensaron en cambiar el sexo del protagonista y que Sandra Bullock le diese vida. “Fuimos a Sandy Bullock y le dijimos: ‘Convertiremos a Neo en una chica’”, dijo el productor Lorenzo di Bonaventura, según publicó The Wrap. Le enviaron el guión, pero pareció no acabar de cuajar. “Simplemente no era algo para ella en ese momento. Así que realmente no fue a ninguna parte”. Solo entonces entró Keanu en escena: insólito, teniendo en cuenta que se trata de uno de los personajes más reconocidos de la historia del séptimo arte.

LA NOVENA OPCIÓN

Y algo similar le ocurrió a Anne Hathaway. Hasta en tres ocasiones dijo que no Rachel McAdams al papel de Andrea Sachs, la protagonista de “El diablo viste a la moda”. “Empezamos a negociar con Annie para hacer un trato y eso no salió bien con el estudio… Entonces se lo ofrecimos a Rachel McAdams. Tres veces. El estudio estaba decidido a tenerla y ella estaba decidida a no hacerlo”, relató el director, David Frankel.

El no de Adams, según publicó la revista Variety, respondía a su deseo de apartarse de títulos “mainstream”. “No tuve que hacer una audición”, dijo Hathaway al medio. “Tuve que ser paciente. Yo no era la primera opción”. En otra ocasión, la actriz comentó haber sido ¡la novena! Pero finalmente, la llamada llegó.

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“Recuerdo el momento en el que me enteré de que me habían dado el papel, corrí gritando por mi apartamento. En aquel momento estaban un montón de amigos, salté al salón y grité ‘¡Voy a salir en El diablo viste a la moda!’”, le dijo la actriz a Entertaiment Weekly. Claro, Hathaway estaba por entonces intentando transicionar del cine juvenil a películas adultas, y todavía no la tomaban en serio...

Más historias de segundas, terceras y cuartas opciones que hicieron historia: Molly Ringwald, recordada por “El club de los cinco”, le dijo que no a “Mujer bonita” porque quería hacer un papel adulto (hizo “Malicious”, un thriller que no pasó a la historia); en una entrevista con Metro hace más de una década, Bette Midler habló sobre sus decisiones profesionales menos acertadas. Midler dijo, por ejemplo, que había rechazado participar en “Misery”, por la que Kathy Bates ganó un Óscar. “Estaba ‘Cambio de hábito’, que fue escrito para mí, pero dije: ‘Mis fans no quieren verme con toga’”, aseguró en la entrevista, según se hicieron eco diversos medios.

Finalmente, fue Whoopie Goldberg la que interpretó a Deloris Van Cartier, una cantante de Reno que es testigo de un crimen y a la que la policía esconde en un convento. “La historia es tan inusual que pensé: ‘Podría hacer esto, me lo pasaría genial’”, dijo la actriz a Entertainment Weekly. “Pero originalmente fue concebida para Bette Midler. Así que fue escrita para alguien que supiera cantar. Entonces, lo único que dije fue: ‘Sabes que eso no es realmente lo que hago, así que Deloris no puede ser una gran cantante. Ella tiene que ser como una maravilla de un solo éxito’”. La cinta se convirtió en un éxito y tuvo una secuela.

Otro personaje clásico que casi no fue: puede que el de Jerry Maguire, en la película homónima, sea uno de los papeles más icónicos de Tom Cruise, pero, según dijo el director de la cinta, Cameron Crowe, a Deadline, el personaje fue ideado con otro Tom en mente.

“La idea era: no seamos esclavos de escribir esto como una película de Tom Hanks en mayúsculas, sino que tengamos a Tom Hanks en nuestras mentes como un tipo que interpretaría a Jerry Maguire. Así que lo desarrollamos en cierto punto para él, basándonos en que sabíamos que realmente quería hacer algo con nosotros”.

Director y actor se reunieron en Nueva York con el guion y Hanks leyó una de las escenas. “Y entonces escuché a Tom Hanks decir las palabras, ‘soy Jerry Maguire’. Y, por supuesto, estuvo genial”. Sin embargo, finalmente, Hanks lo rechazó. Se contemplaron otras ideas, pero Crowe ya había pensado anteriormente en Cruise. “Le enviamos el guion y reaccionó inmediatamente. Estaba entusiasmado con el ángulo deportivo, con la idea de interpretar a un agente”.