Cayó uno de los ladrones que desvalijaron un local

El 24 de mayo último, la dueña de un comercio de ropa infantil del barrio La Cumbre, en jurisdicción de San Carlos, sufrió un disgusto mayúsculo: con el local cerrado, un grupo de ladrones se lo vació por completo y la empujaron a la amarga decisión de cerrarlo.

Es que según lo informado a este diario por la damnificada, Cintia (de 33 años y embarazada de 7 meses), la imposibilidad de volver a comprar toda la mercadería que le sustrajeron y sumado a que se encontraba alquilando ese comercio de 134 entre 32 y 33 , no le dejaron otra opción.

Dentro de este contexto, ayer se conoció que policías de la DDI detuvieron en Quilmes, tras una paciente investigación, a uno de los integrantes de la banda.

Fuentes oficiales confirmaron que se trata del conductor de la camioneta Renault Kangoo blanca, en la que los delincuentes cargaron la mayor parte de la mercadería de aquel comercio. También lo hicieron en un Volkswagen Polo verde.

También se indicó que al vehículo en cuestión, que en el procedimiento fue incautado, se la habían realizado “algunas modificaciones”.

Vale consignar que la pesquisa estuvo a cargo del fiscal Álvaro Garganta, de la UFI Nº 11 de La Plata. Y ahora se procura dar con el paradero del resto de los delincuentes.

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CON UN “PASAMANOS”

Como lo reflejó EL DIA en su edición del 28 de ese mes, dado que recién un día antes la comerciante hizo público el caso a través de las redes sociales, el ataque fue realizado mediante la modalidad conocida como “pasamanos”.

Así, no menos de seis sujetos, que llegaron al lugar a las 2 de la mañana a bordo del Volkswagen Polo verde, la referida camioneta y un coche de color rojo, con sincronizados movimientos se pusieron en línea para ir pasándose toda la indumentaria apostados en la puerta del local y dicha camioneta.

Cintia indicó que “entraron tres delincuentes con bolsas grandes, del tipo consorcio, donde cargaron toda la ropa del negocio, que robaron al igual que el DVR de las cámaras de seguridad interiores”.

En las imágenes captadas por una cámara de seguridad de esa cuadra, se observa a dos de los maleantes -que se bajaron del Polo verde que paró frente a la tienda de ropa para niños- intentando repetidas veces violentar la cerradura de la cortina metálica mediante un cortafierros con el que además rompieron un candado.

Una vez que consiguieron ese propósito escaparon, se cree que para no llamar la atención de los vecinos, aunque regresaron poco después junto a cómplices en la Kangoo y el coche rojo, para darle forma al audaz golpe.

“DEJARON el local pelado”

Durante el diálogo mantenido con este diario a pocas horas del lapidario robo sufrido, Cintia graficó además que “hasta los percheros de madera muy bonitos que tenía se llevaron estos delincuentes”.

Y amplió: “Apenas me dejaron unos pocos gorritos y alguna que otra prenda. Pero el local quedó pelado”.

En cuanto a cómo huyó la banda del lugar, señaló que “se fueron en dichos vehículos tomando por calle 134 en dirección a 32”.

Acotó que “ni las patentes de esos rodados se corresponden con las que les pertenecen”.

Volviendo sobre su drástica decisión de cerrar su comercio de venta de ropa para bebés y niños, Cintia explicó que “en estos momentos no dispongo de la suficiente cantidad de dinero para reponer la mercadería. Y lo alquilo, así que no tiene sentido seguir”.