Trompeó a una mujer de 84 años durante un robo
Edición Impresa | 27 de Junio de 2022 | 03:40

No es la primera vez que delincuentes armados ingresan a robar a una vivienda ubicada en la esquina de 526 y 115. Esa propiedad, la cual está dividida en distintas parcelas, parece ser blanco fácil para los ladrones.
En lo que va del año, ya se contabilizaron al menos tres asaltos en el mismo cruce de calles. Esta vez, la víctima resultó ser una jubilada de 84 años a la que despojaron de 15 mil pesos y un anillo de oro, no sin antes golpearla brutalmente en el rostro.
Este violento robo fue perpetrado ayer, a las 20.30. Según se desprende de la denuncia policial, la mujer estaba a punto de cenar, cuando escuchó que alguien intentaba entrar por la ventana.
La jubilada se quedó en shock y temió lo peor. Así fue que un sujeto, tras saltar una reja metálica, logró abrir el postigo de madera e ingresó al domicilio.
No se determinó hasta el momento si actuó sólo, o algún cómplice lo estaba esperando afuera. Lo cierto es que este delincuente sacó un arma blanca de entre sus ropas y comenzó a amenazar a la víctima.
La mujer no ofreció resistencia, pero sí se puso muy nerviosa ante semejante situación y no supo como reaccionar. El ladrón, con pocas pulgas, la tomó del brazo y la golpeó en el rostro.
Primero le exigió que le entregue la alianza de oro que tenía puesta en uno de sus dedos. Después, la llevó a la habitación de donde sustrajo alrededor de $15.000.
El delincuente tomó el dinero y huyó como rata por tirante, por la misma abertura donde entró.
Tras quedar malherida y con un susto desmesurado, la mujer tomó su teléfono y marcó al 107. A los pocos minutos arribó una ambulancia del SAME.
Fue el personal médico quien alertó luego al 911. Fue así que llegó un móvil de la comisaría sexta de Tolosa, efectivos del Grupo Táctico Operativo (GTO) y la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI).
Voceros informaron a EL DIA que la mujer sólo sufrió traumatismos que no revisten gravedad, por lo que no tuvo que ser trasladada al hospital.
En tanto, agentes de la Policía Científica tomaron huellas dactilares en toda la propiedad, y los investigadores ya solicitaron las cámaras de seguridad de la zona para intentar determinar la identidad del ladrón y corroborar si actuó en soledad o estuvo acompañado.
Se iniciaron actuaciones por “robo”, causa que investiga la UFI Nº 9 de Autores Ignorados.
Y VA EL TERCERO
Como se mencionó anteriormente, en esta vivienda ya robaron al menos tres veces en lo que va del año.
En el asalto anterior, dos delincuentes entraron a un deposito emplazado en la misma propiedad, donde los dueños de un petshop guardan sus productos, y se llevaron $400.000.
Uno de los encargados de esta forrajearía, que evitó ser identificado, informó a este diario que el audaz golpe en ese galpón tuvo lugar “poco después de las 2 de la tarde del jueves 19 de mayo”, en momentos en que empleados atendían a un proveedor que llegó con mercadería.
Uno de los asaltantes tomó de rehén a un trabajador y caminó hacia el interior del enorme recinto, donde exigió la inmediata entrega de la recaudación.
Al mismo tiempo, recordaron otro episodio ocurrido en febrero. “También sufrimos un asalto a mano armada en nuestro depósito”, detallaron.
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