Cara costumbre: el alza en el precio del café sacude los bolsillos

Tomar un café en un bar, ya sea por un encuentro social o en soledad, entre trámite y trámite, por caso, es de esas costumbres de lo más arraigadas entre los platenses. La salida tampoco suele resultar un impacto fuerte al bolsillo. Sin embargo, en estos días, el precio de ese pocillo “chico” o “americano”, que se sirve “negro” o “cortado”, sorprende a los consumidores. Ocurre que el principal ingrediente de la infusión, los granos de cafeto, no se producen en este país; por lo general son importados de Colombia y Brasil. Claro que el valor depende de la zona y la marca comercial, pero por un café servido en la barra o una mesa se puede llegar a pagar hasta 500 pesos.

El café, además, es parte de la cotidianidad en innumerables hogares. Solo o con leche se consume en los desayunos de grandes y chicos, en las meriendas, y en muchas familias corona la cena. El precio de ese café, que puede adquirirse soluble en los clásicos frascos o molido y torrado para pasar por un sistema de filtro, se disparó con todo. Con excepción del sector de las góndolas con Precios Cuidados, donde los números se mantienen congelados, el kilo entre las primeras marcas se ubicó en las últimas horas a 1.600 pesos.

Repasemos algunos de los precios de café (se encuentran todo tipo tamaños y versiones) que se ven hoy en las cadenas de súper. El más barato dentro de los que se preparan con filtro -como se dijo, sin tener en cuenta los productos cuyos valores están regulados por el Estado- es el pequeño paquete de 125 gramos, que está en una de las primeras marcas a 215 pesos. A partir de ahí la escalada pone al consumidor en alerta: 500 gramos, 777 pesos; y 1 kilo, 1.555 pesos, siempre hablando de la misma firma comercial.

Otra marca igual de reconocida ofrece los 500 gramos de café molido y torrado a 799 pesos y el kilo a 1.570 pesos. En cambio, una alternativa que suele estar entre las más caras se vende a 1.300 pesos los 500 gramos.

En los comercios de “cercanía” la disparidad de precios es todavía más marcada que en las grandes sucursales de supermercados, pero lo que aseguraron en todos los comercios consultados por este diario es que en ningún caso “hay faltantes” de la demandada infusión.

Desde un supermercado de La Loma, Santiago Britos, uno de los socios del emprendimiento, subrayó que en las líneas principales de café “hasta ahora no se registraron aumentos” y en ese local se mantienen los precios. “Achicamos un poco el margen de ganancia y estamos tratando de bancarla, porque si bien todavía no recibimos mercadería con recargo, se viene un ajuste de entre el 30 y el 40 por ciento”.

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En la variedad más popular de café, la soluble, es donde se dan las mayores diferencias de precios. Por ejemplo, un envase de 170 gramos de una de las marcas más clásicas, en el súper del barrio de La Loma cuesta 550 pesos y el mismo artículo en una cadena comercial sale 1.045 pesos.

Fernando Savore, presidente de la Federación de Almaceneros de la Provincia, descartó desabastecimiento de café y remarcó, en ese sentido, que “es un fantasma que está detrás de la especulación”. Contó, como ejemplo, que “la semana pasada se rumoreaba que había faltantes de azúcar; azúcar hay, pero aumentó un 20 por ciento en los últimos días”.

Según afirmó el dirigente, la última suba en el café se dio hace un mes. “Una marca lo aumentó un 20 por ciento y otra primero un 10 por ciento y a los pocos días otro 10 por ciento”.

Aseguran que el “faltante de café puede ser una especulación” / S. Casali

EN LOS BARES

También son dispares los valores que se piden por un “jarrito” en las cafeterías. En uno de los locales dedicados a recibir consumidores de café, un espacio al paso del centro comercial de Calle 12, un pocillo de café solo o cortado con leche, se paga 170 pesos. El “doble” cuesta ahí 310 pesos. “Acá el café es lo único que no aumento”, aseguró la moza del lugar.

En la tradicional esquina de 54 y 5 tampoco se han movido los precios de fruto colombiano. Muestra ahí la cartelera de precios que el café solo sale 200 pesos; el café con crema, 230 pesos; y el doble, 250 pesos.

Señaló el encargado del lugar, Martín Paula: “sabemos por nuestro poveedor que tendríamos que estar 50 pesos arriba, pero tratamos de no trasladar los aumentos a los clientes tan abruptamente”.

Otros son los costos en, por caso, una cadena internacional de cafeterías con locales en La Plata, donde se lleva un vaso largo por 530 pesos.