Saint Felicien Malbec, de Bodega Catena Zapata

Por ROBERTO LOZA BRUNO (*)

Es una de las etiquetas más representativas de nuestro vino argentino, ya que detrás de ella hay mucha historia. En 1963, cuando nació Saint Felicien, fue la primera etiqueta argentina en nombrar al varietal. En aquellos años, lo común era elegir nombres franceses para los vinos, y Nicolás Catena decidió homenajear a su amigo Feliciano, quién siempre lo alentó para hacer vinos de alta gama. Saint Felicien es la marca más tradicional de la familia, pero a su vez una de las más disruptivas. Es uno de los vinos que mantiene su esencia, historia y calidad. La pintura que decora su etiqueta fue creada por un mendocino, el prestigioso Carlos Alonso. ¿Qué tiene de interesante este malbec? Está elaborado con una selección de parcelas de los viñedos La Pirámide ubicados en Agrelo, y Nicasia, en Paraje Altamira. Es un vino que se muestra de un color intenso, de nariz seductora y atractiva, en la que despliega aromas de ciruelas maduras y matices florales, dejos de especias dulces; en boca marca su recorrido con personalidad, pero a su vez es suave y sabroso, de final prolongado. Por sus características es ideal para compartir en familia y con amigos, el compañero del típico asado argentino, las empanadas de carne cortada a cuchillo, y también unos canelones de osobuco braseado con salsa fileto.

Precio: $2.900

(*) Sommelier de El Rincón de lo Querido