Millonario golpe: entraron a los tiros en un country de Olmos

La noche del viernes último será tristemente inolvidable para los habitantes de una de las viviendas de un club de campo que está ubicado en jurisdicción de Lisandro Olmos.

Fuentes policiales ligadas a la investigación del caso indicaron que, alrededor de las 21.45, llegaron al country La Enriqueta, situado en ruta 2 y calle 90, a la altura del kilómetro 65, dos delincuentes que portaban armas de fuego y con una audacia a toda prueba.

Si bien no trascendió de qué manera ambos asaltantes lograron acceder al interior de este predio, lo cierto es que, según lo informado por esos voceros, aquellos irrumpieron a los tiros en una de las casas del predio.

“Destrozaron la puerta balcón de vidrio de la parte trasera de la casa con dos disparos de arma de fuego. Y aterrorizaron a quienes estaban en el lugar, dos hombres de 49 y 47 años, que viven en el lugar, una mujer de 42 años, oriunda de Quilmes”, citó uno de los pesquisas.

Se consignó que el mayor de los hombres es ingeniero en sistemas informáticos y el restante es enfermero. Sobre la mujer, simplemente se mencionó que es empleada.

ROBARON UNA CAJA FUERTE

En cuanto a cómo se desarrolló el violento episodio, los mismos informantes revelaron que los ladrones “robaron una caja fuerte de pequeñas dimensiones, que contenía la suma de 2.000.000 de pesos, así como también una tablet, pasaportes, llaves y un bolso con diversas pertenencias”.

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Al mismo tiempo, puntualizaron que todo el botín fue cargado en un auto Renault Fluence, de color blanco, perteneciente a una de las víctimas. Más tarde fue hallado a un kilómetro del lugar del asalto.

GOLPEADOS Y ATADOS

Previamente, los atacantes “ataron de manos a las víctimas con sus propias corbatas”.

También se consignó que cuando los damnificados escucharon las detonaciones de armas de fuego “atinaron a dirigirse a un dormitorio de la planta alta de la vivienda”.

Paralelamente, se citó que los moradores “fueron perseguidos por los asaltantes, quienes lograron finalmente reducirlos, golpearlos y maniatarlos”.

Una vez que los delincuentes emprendieron la fuga, luego de permanecer allí durante un tiempo no especificado, los damnificados comprobaron los faltantes más arriba enumerados.

Posteriormente, se acercó a la escena una ambulancia del SAME. En la causa interviene la UFI Nº 9.