Tremenda versión: Lotocki, ¿fue apuñalado en la cárcel?

Una tremenda versión contaron ayer en “A la Barbarossa” que tiene que ver con la salud de Aníbal Lotocki. Según la panelista Analía Franchín el cirujano habría sido “apuñalado” por otros presos del penal en donde está alojado.

“Esto me lo confirman dos personas desde adentro, pero tengo que ser clara y tengo que decir que los abogados de Lotocki lo desmienten. Pero a mí hay dos personas del penal de Ezeiza que me dicen que Aníbal Lotocki fue apuñalado, que está fuera de peligro, que está en el hospital”, reveló Franchín, muy cautelosa.

Lo que sí está confirmado es que Lotocki está mal de salud, tanto, que requirió asistencia médica. “A Pía (Shaw) le confirman que está en el hospital desde que ingresó. Eso sería raro”, agregó la ex participante de “MasterChef Celebrity”.

Según Franchín, la versión indica que “tuvo un encontronazo con unos presos que le piden dinero. Hay otros abogados, que por ahora no tengo permitido nombrarlos, que confirman que fue apuñalado. Pero los abogados de Lotocki dicen que no”.

En ese marco, Georgina Barbarossa, la conductora del programa matutino que se emite de lunes a viernes por Telefé, hizo un comentario que no pasó inadvertido: “¿Y no pudo haberse acuchillado, autolesionado, él mismo?”. Ante la negativa de sus compañeros, la animadora y actriz insistió: “Mirá, ¡ha cortado a tanta gente! Ha sido un carnicero con tanta gente que no le costaría nada a él”.

Tras haberse entregado el miércoles 18 de octubre en La Plata, Lotocki fue traslado luego a la Alcaidía de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal Argentina (PFA), ubicada en Madariaga y General Paz, en el barrio porteño de Villa Lugano, y, después fue derivado al complejo penitenciario de Ezeiza.

La orden de detención fue dispuesta por la sala IV del tribunal de alzada, que le había confirmado el procesamiento por homicidio simple del empresario Zárate (50), quien murió el 15 de abril de 2021 en una clínica del barrio porteño de Caballito, luego de ser operado por Lotocki, a quien también se le imputa la falsificación de documentos.

“El estado actual de los procesos acumulados pone en evidencia una sustancial variación en la naturaleza y gravedad de los episodios en examen y de su proyección en aquellos y en la estimación de los reaseguros tendientes a mantener a Aníbal Lotocki sujeto al proceso”, sostuvieron los camaristas.

Al evaluar los riesgos de que el imputado permanezca en libertad, los jueces sostuvieron que la voluntad de entorpecer la investigación era evidente “por los indicios que proporcionaba ya la falsificación de la historia clínica” del paciente.

También resaltaron que consta en el expediente “el incumplimiento por Lotocki, en tres oportunidades, de la obligación de informar circunstancias que pudieran implicar una ausencia de su domicilio por más de 24 horas”.