Desde Chile, Benjamín Walker llega con su guitarra y su voz

Heredero de la tradición latinoamericana por su mamá y de la anglo por su papá, el joven cantautor llega por primera vez

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Joven cantautor chileno, Benjamín Walker tiene la ilusión de las primeras veces con el que será su debut en La Plata en el marco de una gira por el país que lo tiene repasando su elogiado repertorio y adelantando lo que será su cuarto material que verá la luz en enero próximo y que llevará por título “Libre”.

“Las expectativas que tengo con La Plata son las mismas que tengo cuando me acerco a un lugar nuevo, de conocer bien la ciudad, de conocer cuál es la personalidad de su audiencia, de qué se trata un poco. Creo que cada lugar, cada geografía, tiene una personalidad distinta y es muy entretenido empezar a conocer una desde el principio”, manifiesta el artista en diálogo con EL DIA.

Con tres materiales de estudio en su haber, y colaboraciones con artistas de la talla de Perotá Chingó, Silvana Estrada, Vanessa Zamora, Pedro Pastor o Juan Pablo Vega, Walker desembarcará en una ciudad en la que viven “varios amigos” que los caminos de la música le han regalado. Por eso, el de esta noche, en Otra Casa (59 entre 14 y 15), y junto a Guada, será un show especial.

Un show en el que, a contramano de otras giras, en las que iba de lugar en lugar mostrando las canciones reunidas en un disco ya editado, Benjamín sacó a probar los temas que reunirá en su próximo aún sin editar. Algo diferente e inspirador.

“Entre el azar y las decisiones, decidí empezar a girar con las canciones nuevas para curtirlas, para saber cuál es la respuesta del público y para también, en última instancia, generar un espacio de intimidad y de exclusividad que creo que no es propio de nuestra época”, explica el cantautor cuya propuesta se mueve entre dos tradiciones musicales.

“Una propia de nuestra geografía latinoamericana”, de la que se nutrió de niño, en gran parte gracias a su madre, también cantautora, que ha llegado a compartir escenario con Mercedes Sosa, y que lo inició en el camino de “la guitarra de palo o de nylon como decimos en Chile”. También lo influenciaron artistas como Atahualpa Yupanqui, Juan Falú, Cuchi Leguizamón y Pedro Aznar, entre más. De su padre recibió “toda la tradición del folk sesentero y setentero”, con artistas como Cat Stevens, Joan Baez, Peter, Paul & Mary, Simon & Garfunkel y Joni Mitchell.

Sobre estas dos corrientes, Benjamín construyó una identidad sonora con “canciones que se sostienen con la voz y la guitarra, además una buena cuota de pop, que también me gusta, y de música alternativa”. Dos bases que complementó con algunas sonoridades de Brasil además, claro, “del contenido y la melanconía de las letras, muy de la tradición chilena, que viene de Víctor Jara y Violeta Parra”.

“Libre” será su cuarto álbum, una bisagra que define como “el más proxémico a lo que soy yo, más directamente, sin eufemismo, sin embellecer el lenguaje. Hay temas y letras mucho más directas de lo que yo había estado acostumbrado a hacer en el pasado”.

Benjamín gira por estos días por Argentina (tocó en el Konex y en el C.C. Thames) tras presentaciones en Colombia y México, en donde está radicado desde hace algunas temporadas, en el marco de un año de mucha actividad, que lo tuvo mostrando sus canciones por Europa y que lo tendrá debutando en países como Uruguay, Perú y Estados Unidos, entre otros.

“Ha sido un año de cruzar fronteras con mis canciones y eso me tiene muy contento porque en mi caso parte de la ilusión de ser cantautor era vivir esta bohemia cinematográfica de estar viajando y conociendo artistas de todos los rincones del mundo y relacionándome con ellos, y ha sido un poco así, lo que me tiene muy contento y en constante exploración musical”, resume a modo de balance de su presente artístico.

 

Benjamín Walker

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