Un jubilado muy grave por la explosión de una garrafa

La tristeza y la preocupación eran ayer las sensaciones dominantes entre los vecinos de un sector de Punta Lara, en Ensenada, por el terrible accidente que sufrió un jubilado de 92 años, muy querido en el barrio, que fue identificado como ramón Barrionuevo.

El hombre quedó al borde de la muerte luego de que, por causas que aún son motivo de investigación, una garrafa explotara en el interior de su vivienda ubicada en el Pasaje 22ª entre Almirante Brown y 5 el pasado sábado por la noche, alrededor de las 22 horas.

El hombre no sólo se vio afectado por la embestida de la onda expansiva, sonora y abrasadora de la explosión.

El estallido de este artefacto también provocó un voraz foco ígneo y así el jubilado quedó atrapado por las llamas y el humo tóxico que se generó por la combustión de diversos objetos.

Debido al fuerte estruendo, la situación fue descubierta por los vecinos de la cuadra casi de forma instantánea.

Al salir de sus casas para ver qué sucedía, se encontraron con una espeluznante escena: las llamas y el humo emanaban del interior de la casa del damnificado y todo apuntaba a que se encontraba allí adentro.

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Si bien hubo más de un frentista pretendía ingresar a la morada con el objetivo de rescatar al hombre pululaba el temor de que pudiese haber más explosiones.

Después de varios segundos de conjeturas finalmente uno de los vecinos entendió que ya no quedaba más tiempo y decidió arriesgarse.

Si bien se logró abrir la puerta, el sofocante calor y el humo negro que emanaba del interior de la casa producto de la combustión de materiales sintéticos generaron una infernal atmósfera que lo obligaron a retroceder sin poder siquiera inspeccionar u oír que estaba aconteciendo en el interior.

Los intentos continuaron hasta que, cuando el fuego dio una ligera tregua, el hombre logró avanzar unos pasos por la casa y pudo confirmar que había un individuo tendido en el suelo.

Convencido de que aún podía hallar con vida a su vecino volvió a introducirse y logró rescatar al jubilado.

Entre los presentes comenzaron a realizar las maniobras de RCP ya que el hombre se encontraba inconsciente.

Mientras un grupo llevaba a cabo esta labor arribó al lugar una ambulancia que trasladó a la víctima hasta el hospital Cestino en donde hasta el cierre de esta edición permanecía con pronóstico reservado.

Así se desprende de los datos que dieron a conocer desde el nosocomio local.

Se informó que tras examinar a las víctimas se pudo establecer que el jubilado de 92 años presenta un 90% del cuerpo afectado con lesiones de diferente grado originadas por la exposición a altas temperaturas.

En tanto, en el caso del joven que rescató al jubilado se dio a conocer que sufrió heridas leves. Pese a ellos, se expuso que continuará internado con el objetivo de monitorear y seguir de cerca su evolución.

Con respecto al incendio, se informó que fue sofocado por una dotación del cuerpo de bomberos local y que sólo se vio afectada la habitación en la que se produjo la reacción.

En este sentido, ayer por la tarde la Policía Científica llevó adelante una rigurosa labor en el lugar con el objetivo de contar con la mayor cantidad de datos posibles para determinar cuál fue la génesis de este accidente que puso en vilo a todo un barrio.

Si bien los investigadores no descartan ninguna posibilidad, en principio, la principal hipótesis que se analiza es la que postula una falla en la conexión del dispositivo con la fuente de calor.

“Probablemente haya habido una fuga, el abuelo no se dio cuenta, fue a prender la cocina y voló todo por los aires. También se tendrá que analizar el estado de la garrafa. Pero hasta el momento son todas conjeturas. Hay que esperar los resultados de las pericias”, dijo una fuente que participó del operativo que se llevó a cabo en Ensenada.