Delito de alto vuelo: un “hombre araña” se coló en un edificio

El delito se manifiesta con distintas modalidades en la Ciudad y llega a todas partes. Lo sufren quienes viven en barrios cerrados, en casas particulares y también en construcciones de altura.

Pese a la creencia que algunas propiedades pueden quedar al margen de la realidad de inseguridad que afecta a los platenses, por sus características o ubicación, las estadísticas demuestran lo contrario.

En estas últimas horas, hubo hechos asignados a escaladores o más conocidos como “hombres araña”.

Pasó el domingo en un edificio de 3, Diagonal 80 y 46 y ayer en otro de 50 entre 2 y 3, a metros de la sede del Ministerio de Seguridad bonaerense.

De acuerdo a lo que pudo saber este diario, la propietaria del inmueble no se encontraba en el lugar y fue advertida del caso por un vecino.

Según los voceros, en esa comunicación le advirtieron a la víctima, de 21 años, que un desconocido había salido por el balcón de su departamento.

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Desesperada, ya sospechando lo peor, la chica se presentó en su casa y, apenas llegó la Policía al lugar, pudo comprobar que efectivamente había sufrido un robo.

Las mismas fuentes relataron que, de una primera inspección por la vivienda, pudo comprobar que algunas cosas no estaban como las había dejado.

Pero lo peor lo descubrió cuando ingresó en su habitación y observó que no estaba la plata que tenía guardada .

Los informantes refirieron a una suma cercana a los 100 mil pesos.

Respecto del autor del hecho, nada se sabe de él.

Seguramente, con el análisis de las cámaras de seguridad de la zona, los investigadores intentarán identificarlo.

En el hecho tomó intervención personal de la comisaría primera, con conocimiento de la UFI de Autores Ignorados N° 9 de La Plata.

Al parecer, el delincuente hizo pie en el techo de un comercio que existe en la entrada al edificio y, desde allí, accedió a la unidad funcional que está en el primer piso.

Demás está decir que la osadía con la que actuó no se puede soslayar.

La zona es una de las más concurridas de La Plata y por ella transitan habitualmente gran cantidad de móviles policiales.

Como se dijo, a pocos metros se encuentra la sede del Ministerio de Seguridad provincial, por lo que el escalador no actuó sobre seguro.

Sin embargo, una vez que accedió al botín se dio a la fuga y no dejó rastros. Al menos que se conozcan.

Quedará en manos de los pesquisas la posibilidad de concretar su captura, previo análisis de los distintos elementos de prueba que se puedan ir recolectando.

En principio, no se puede decir que se trate del mismo ladrón que el domingo pasado accedió a otro departamento céntrico, pero en un segundo piso.

Como este diario publicó en exclusiva, un delincuente concretó un audaz golpe en un edificio ubicado en la intersección de 3, Diagonal 80 y 46.

También bajo la modalidad “hombre araña”, aprovechó que el morador de un departamento del segundo piso se había quedado dormido en el living, para ingresar a robar en una habitación por el balcón.

En esas circunstancias, al sentir ruidos extraños, pensando que se había metido algún pájaro o animal, la víctima se acercó al dormitorio y allí descubrió la presencia de un extraño.

En realidad, según aclararon los voceros, el damnificado, de unos 32 años, alcanzó a ver por una ventana las piernas de una persona, por lo que pegó un fuerte grito para que se fuera.

Instantes después, al asomarse hacia la vía pública, observó como un auto de color verde escapaba marcha atrás, no pudiendo aportar ningún otro dato identificatorio.

Demás está decir que el hecho tuvo lugar cerca de las cuatro, por lo que, entre el sueño interrumpido y la adrenalina que generó el inesperado suceso, no fue muy clara la descripción física aportada sobre el intruso.

Por eso ahora los investigadores se centraron en el análisis de las cámaras de seguridad de la zona para obtener algún registro del asaltante y de cualquier cómplice que lo haya secundado.

En ese sentido, por lo que le comentó una vecina, abajo lo esperaban otros tres delincuentes.

Se supo que entre los objetos robados, había un televisor, una billetera con algo de dinero y documentación y un teléfono celular. El ladrón, con una habilidad digna de destacar y haciendo pie como se podía, habría trepado por el frente de la construcción.

Lo que aún no está del todo claro es el tiempo que les demoró la maniobra.

Sobre todo por el descenso con el televisor, de 32 pulgadas, lo que seguramente les demandó un esfuerzo especial. Casi como una tarea de ingeniería.

Tampoco se conoce si al departamento entro un solo ladrón o fueron más personas.