La salud de Francisco a lo largo de los años

Francisco ha estado hospitalizado en tres ocasiones desde que fue elegido Papa en 2013 y, cuando era joven, se sometió a una operación importante para que le extirparan parte de un pulmón. Entre medio, el pontífice, de 86 años, ha padecido ataques de ciática, lo que le ha causado problemas para caminar y estar de pie. Más recientemente, sufrió una distensión de ligamentos y una pequeña fractura en una rodilla que le obligaron a usar silla de ruedas y andador durante más de un año. Sobre este problema de rodilla, una dolencia de la que no hay información oficial, el pontífice ha dicho en más de una oportunidad que no quiere operarse.

Francisco tiene un médico personal, el doctor Roberto Bernabei, un clínico y especialista en geriatría en la Universidad Católica del Sagrado Corazón en Roma. Cuenta también con un enfermero personal, Massimiliano Strappetti, un empleado del sistema de salud del Vaticano a quien el Papa atribuye el mérito de salvarle la vida cuando le diagnosticó su problema intestinal en 2021.

En 2022, Francisco nombró a Strappetti su “asistente personal de salud”. Ambos suelen acompañarlo en sus viajes al extranjero.

En 1957, Jorge Bergoglio, que por entonces tenía poco más de 20 años y vivía en Argentina, sufrió una grave infección respiratoria que obligó a los doctores a extirparle parte de un pulmón. Más tarde, recordó que una enfermera le salvó la vida al decidir duplicar la cantidad de medicamentos que recibía.

Del 4 al 14 de julio de 2021, el Papa pasó 10 días en el Policlínico Universitario Agostino Gemelli de Roma por un estrechamiento del intestino grueso, según información del Vaticano. Los médicos le extirparon 33 centímetros de colon. Tras el alta, Francisco dijo que podía comer lo que quisiera, pero lamentó no haber respondido bien a la anestesia general.

El 24 de enero de 2023, en una entrevista con The Associated Press, el pontífice contó que había vuelto a padecer diverticulitis, o inflamación de las protuberancias en la pared intestinal que motivaron la operación de 2021, pero que estaba bajo control. Del 29 de marzo al 1 de abril de este año, pasó tres días en el Gemelli por una infección respiratoria tras sentir un dolor agudo en el pecho y sufrir problemas para respirar. Los médicos le diagnosticaron una bronquitis aguda y lo trataron con antibióticos intravenosos.

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El Papa argentino suele hablar en forma “libre y transparente” sobre sus problemas de salud, tanto físicos como psicológicos. Pese a ello, el Vaticano sigue manteniendo el habitual secretismo e informa en forma vaga, lo que genera dudas e interrogantes sobre las reales condiciones del Santo Padre.

El martes último, Francisco se sometió a diversos estudios médicos en el centro hospitalario Gemelli y regresó al Vaticano. Y ayer, se internó en este mismo centro médico para someterse a la cirugía de reparación de la pared abdominal, ya que una hernia consecuencia de una intervención quirúrgica anterior le estaba provocando una obstrucción intestinal. Francisco quedará internado varios días.