Trato cruel a dos nenes, el caso que conmueve a Olmos

Esta terrible historia ya la adelantó EL DIA en su edición anterior. En una quinta de la localidad de Lisandro Olmos, sobre ruta 36 y 84, encontraron rastros de la peor violencia física y moral: contra un chiquito de apenas seis años. Por eso el fiscal que investiga el hecho, Gonzalo Petit Bosnic, titular de la UFI Nº 3, pidió la detención del padre y de su pareja, para quienes agravó su situación penal por haber mediado alevosía.

La imputación de los cargos está dividida en dos partes. Por un lado “lesiones leves agravadas”, en relación al hecho descripto y, por el otro, “abandono de persona agravado”, por otro chiquito conviviente de la pareja, de tres años, quien tenía signos de abandono.

En la descripción de la materialidad ilícita, el fiscal Petit Bosnic señaló que todo ocurrió el pasado 25 de agosto, en la quinta Los Pinos, donde al pequeño de seis años “le propinaron golpes en distintas partes del cuerpo (...), ocasionándole lesión excoriativa costrosa superficial en región cigomática derecha, pequeñas lesiones múltiples y lineales en el lado izquierdo de la región cervical, anterior a tercio proximal de músculo esternocleidomastoideo y lesión costrosa superficial en lado izquierdo de región lumbar, las cuales fueron calificadas de leves”.

Respecto del otro menor, dijo el representante del Ministerio Público que “desde una fecha aún sin determinar, pero hasta el día 28 de agosto de 2023, dos sujetos, uno de ellos de sexo masculino y la otra de sexo femenino, el primero de ellos en carácter de progenitor (...) abandonaron a su propia suerte (...), omitiendo satisfacerle las necesidades básicas y elementales (alimentación, cuidado, higiene, protección, vestimenta), que la edad requería para su digna supervivencia, en un contexto de notorio maltrato infantil, que era acompañado por la implementación de castigos vejatorios y la imposición de tareas en el interior de su hogar inhumanas y degradantes, exponiéndolos de esa manera a un riesgo cierto para su salud”.

Por ejemplo, se citó que los hacían juntar las ortigas con la mano y se sabe que esa planta libera una sustancia alcalina, que produce escozor e inflamación en la piel.

También se habló de encierros prolongados, con cadena y candado, cuando consideraban que el comportamiento no era adecuado para sus cánones y azotes con cables en la espalda.

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Al parecer, varias de las personas que habitaban el lugar, prestaron declaración ante las autoridades y robustecieron la prueba para que la Justicia entienda acorde a derecho el requerimiento de detención.

Además, sostuvo Petit Bosnic, que no vislumbra que, por todo lo descripto, pueda recaer en este caso una pena de privación a la libertad que no supere los tres años de encierro.

Ahora el planteo fiscal deberá ser resuelto por el juez de garantías, Agustín Crispo.

Los chiquitos, se sabe, en esos primeros instantes en que tomaron intervención las autoridades, quedaron a cargo del Servicio Zonal de la Municipalidad de La Plata, pero, por su estado, se creyó aconsejable derivarlos al Hospital de Niños, con la finalidad de que sean asistidos y sus parámetros clínicos compensados.

Para lo que viene después, ya se dictó una medida de abrigo y serán derivados a un hogar de niños, mientras la Justicia de Familia resuelve a quién eventualmente le otorgará la guarda provisoria.