Una decisión celebrada por la oposición y criticada por el oficialismo

Rápidamente, la bancada de Juntos por el Cambio en el Senado salió a celebrar la decisión de la Corte Suprema de Justicia de apartar a la presidenta de la Cámara Federal de Casación, Ana María Figueroa, una jueza clave que debía resolver casos sensibles para la vicepresidenta, Cristina Kirchner.

Mientras, desde el Gobierno le apuntaron al máximo tribunal y a los medios. Fue el ministro de Justicia, Martín Soria, quien a través de X (exTwitter) se despachó: “Cuando Macri y sus medios promueven juezas que cumplen 75 años, pueden continuar 2 años sin acuerdo del Senado gracias al silencio cómplice del Partido Judicial”, dijo citando el nombramiento de la jueza Silvia Mora, del año 2019, y remató: “En Argentina la Corte Suprema no aplica la Constitución, solo interpreta los titulares de Clarín y La Nación”.

Pese a destacar el fallo, en la oposición advirtieron que el de la magistrada era solo uno de los 74 pliegos judiciales que el oficialismo seguirá intentando aprobar en la Cámara Alta “con el objetivo de incidir en la composición del Consejo de la Magistratura”.

El 9 de agosto, Figueroa cumplió 75 años, la edad máxima que la Constitución establece para que los jueces se jubilen, siempre y cuando no haya un acuerdo en el Senado que extienda sus funciones. Antes de esa fecha, el oficialismo intentó al menos dos veces sesionar para aprobar el pliego de la jueza, pero nunca obtuvo quórum. Ayer, finalmente, la Corte cesó a la magistrada en sus funciones.

“La Corte no hizo más que ratificar la vigencia de la Constitución, sin privilegios para ningún magistrado ni beneficios para ningún político. Siempre estuvimos firmes en la postura de no validar un espacio de impunidad para la Vicepresidenta. Lamentablemente, durante todos estos meses el kirchnerismo se empecinó con el pliego de Figueroa y paralizó el funcionamiento del Senado. Eso perjudicó el tratamiento de leyes que respondían a las demandas ciudadanas”, sostuvo JxC en un comunicado.