El morbo del final del torneo

“Somos el equipo más perjudicado de la historia. Hay pruebas de sobra”, dice el comunicado de una agrupación de Huracán. Y cita el libro “La final bastarda”, sobre la final en la que Huracán, perjudicado por el arbitraje de Gabriel Brazenas, perdió 1-0 contra Vélez en 2009, con aquel gol de Maxi Moralez tras clara plancha previa de Joaquín Larrivey contra el arquero Gastón Monzón, más el gol previo anulado por offside que no fue (obra aquí del juez de línea premiado luego con el viaje al Mundial de Sudáfrica). Brazenas recuerda que tampoco cobró un penal previo en favor de Vélez y tiene razón. Pero su designación sin apto físico (quinta definición que dirigía sin ser el mejor árbitro) más su salida definitiva del arbitraje tras ese partido dejaron una mancha difícil de defender, por más que haya querido invitar a pelear a quien cuestionara su honor. Pero también Vélez se queja. De arbitrajes y de un calendario de la AFA que dañó la etapa final de una campaña notable, que apuntaba a un título fácil en la Liga. Es el Vélez que hace un año luchaba por salvarse del descenso. Que se abrazó a lo mejor de su cantera y jugó el mejor fútbol del campeonato.

Pero que quedó sin resto físico. ¿Solo eso? Desde que el 18 de octubre ante River Elías Gómez, uno de los líderes en un equipo joven, salió reemplazado diciéndole “sos un cagón” a Quinteros y fue sancionado con dos fechas, Vélez ganó solo tres de diez partidos, empató cinco y perdió dos. Y, si sacamos el 4-3 contra Boca en semifinales de Copa Argentina, anotó solo cinco goles en nueve cotejos. También Claudio Aquino, líder futbolero, salió enojado aquel partido cuando fue reemplazado. Un ex jugador de Vélez me pide que mire el promedio de edad del plantel y me dice que jamás hay una razón única que explique situaciones así. Y que el problema central es la pérdida de confianza. El nocaut de la final de Copa Argentina que perdió contra Central Córdoba fue doble porque además provocó peleas entre hinchas. Así llegará a su partido morbo de mañana a las 19:30 con Huracán, pero con la ventaja de dos puntos más y las cartas todavía de su lado. Merecería ser campeón.

Torneo curioso el argentino porque, efectivamente, no solo se ven brujas, sino que las hay

Pero si el partido de morbo termina en batalla que liquida a ambos, allí está entonces el tercero en discordia, Talleres de Córdoba, localía fácil ante un Newell’s en pobre forma, y recuperado en este último tramo, sin nadie del club que grite ahora que la AFA los perjudica porque su presidente, Andrés Fassi, es crítico duro de Claudio “Chiqui” Tapia. Campeonato curioso el argentino, porque, efectivamente, no solo se ven brujas, sino que las hay. Pero es un campeonato en el que el equipo enemigo de la AFA podrá gritar mañana campeón. Y el más amigo, el Barracas Central de Tapia, cierra el torneo en el último lugar. El fútbol, definitivamente, es a veces un mundo raro.

LEA TAMBIÉN

Vélez, Huracán y Talleres van por el título en la Liga Profesional