Moda: la fusión del deporte y el estilismo que revoluciona lo urbano

En los últimos años, la moda ha cambiado su enfoque, dirigiéndose hacia tendencias donde la comodidad y la funcionalidad son protagonistas. En medio de este cambio, una nueva corriente llamada “tenniscore” ha emergido, fusionando elementos deportivos y urbanos para crear un estilo único y versátil. Esta tendencia no solo ha conquistado las canchas de tenis, sino que también se ha integrado en la vida cotidiana y profesional, ganando popularidad entre diversas generaciones.

Jason Kim, Vicepresidente Senior de Mercadeo de Lacoste para Norteamérica, observa que marcas tradicionalmente no asociadas con el tenis están adoptando esta cultura en sus propuestas. “Desde las de fast fashion hasta las marcas de lujo, todas han incorporado la cultura del tenis a sus colecciones actuales”, comenta Kim. Este fenómeno se ha extendido más allá del deporte, destacándose en colaboraciones que mezclan ropa deportiva con influencias urbanas y digitales.

Lacoste, por ejemplo, ha trabajado con firmas como A.P.C. y Awake NY para combinar prendas deportivas tradicionales con elementos modernos, resultando en una estética que resuena con millennials y la Generación Z. Estas colaboraciones han renovado el interés en prendas clásicas como las faldas de tenis y los polos, que ahora se ven con entusiasmo tanto dentro como fuera de la cancha.

La versatilidad de estas prendas permite que sean utilizadas en diversos contextos, desde reuniones informales hasta eventos más formales. Esta flexibilidad es uno de los factores que ha impulsado la popularidad del tenniscore, ofreciendo a los consumidores la posibilidad de estar cómodos sin sacrificar el estilo. La combinación de prendas deportivas con elementos urbanos también ha facilitado la creación de looks únicos y personalizados, donde cada individuo puede expresar su estilo propio.

Wilson es otra marca que ha sabido capitalizar el tenniscore. Joelle Michaeloff, Vicepresidente de Diseño de Wilson Sportswear, destaca el éxito de su colaboración con Kith, que adapta estilos tradicionales del tenis a un contexto más moderno y urbano. “Kith ideó un giro moderno en la ropa clásica”, señala Michaeloff. La popularidad de esta colaboración reafirma el atractivo de prendas icónicas del tenis en la moda diaria.

El “Core Aesthetic” se refiere a microtendencias específicas y de corta duración que reflejan influencias culturales y cinematográficas / Web

El éxito de estas colaboraciones no solo se mide en términos de ventas, sino también en la forma en que han influido en otras marcas para adoptar el estilo tenniscore. La colaboración entre Wilson y Kith ha demostrado que hay un mercado creciente para prendas que fusionen lo deportivo con lo urbano, incentivando a otras marcas a explorar este nicho. Esta tendencia ha llevado a un renacimiento de piezas clásicas como la falda de tenis y el polo, que ahora se reinterpretan con un toque moderno y urbano.

En el ámbito preppy, Sporty & Rich ha lanzado una colección junto a Prince, combinando prendas de algodón y estilo preppy con elementos técnicos deportivos. Emily Oberg, fundadora de Sporty & Rich, subraya que su objetivo es promover un estilo de vida sano y feliz a través del deporte. “El tenis puede ayudar a las personas a vivir de forma más sana, más felices y por más tiempo”, afirma Oberg. La colección de Sporty & Rich y Prince ha sido bien recibida por su capacidad para fusionar lo mejor del estilo preppy con la funcionalidad de la ropa deportiva, ofreciendo a los consumidores prendas que no solo son elegantes, sino también prácticas.

El tenniscore también se ha visto influenciado por los estrictos códigos de vestimenta en torneos de tenis. En Wimbledon, por ejemplo, los jugadores deben llevar atuendos blancos, lo que ha llevado a la integración de uniformes deportivos elegantes en la moda diaria. Este estricto código de vestimenta ha obligado a los diseñadores a ser creativos, desarrollando prendas que cumplen con las normas del torneo pero que también pueden ser usadas fuera de la cancha. El impacto de la vestimenta de Serena Williams en el Abierto de Francia 2018, donde su catsuit negro causó controversia, destaca cómo las normas pueden influir en la evolución de la moda deportiva.

En un mundo donde la comodidad es clave, esta tendencia sigue ganando terreno

Además de la ropa, los accesorios juegan un papel importante en el tenniscore. El brazalete de tennis, popularizado por Chris Evert en 1987, es un ejemplo icónico. Kim-Eva Wempe, de la joyería Wempe, señala que este tipo de joyería se ha convertido en un elemento clave tanto en la cancha como fuera de ella, añadiendo un toque de elegancia deportiva al estilo diario. Este tipo de joyería no solo complementa los atuendos deportivos, sino que también se ha convertido en un símbolo de sofisticación y estilo dentro y fuera de la cancha.

Según PlushMag, el tenniscore combina athleisure wear con toques preppy y la sofisticación del blanco tradicional de Wimbledon. Marcas como Thom Browne, Miu Miu y Gucci han adoptado esta tendencia, llevándola de la cancha a la pasarela. Este estilo no solo representa una fusión de moda y deporte, sino que también enfatiza la elegancia en cada prenda, desde chombas hasta faldas plisadas y sneakers. La adopción del tenniscore por parte de marcas de lujo subraya su relevancia y su capacidad para adaptarse a diferentes segmentos del mercado, demostrando que la moda deportiva puede ser tanto funcional como elegante.

El tenniscore no solo celebra el deporte, sino que también redefine la elegancia

El éxito del tenniscore se refleja en su presencia en eventos de moda y en la creciente demanda de prendas que fusionen lo deportivo con lo urbano. Las marcas están cada vez más interesadas en explorar este estilo, y los diseñadores están innovando constantemente para crear nuevas interpretaciones del tenniscore. Esta tendencia no solo celebra el deporte, sino que también redefine la elegancia y la funcionalidad en la moda urbana. En un mundo donde la comodidad es clave, esta tendencia sigue ganando terreno, consolidándose como un pilar del estilo contemporáneo.

El “Core Aesthetic” se refiere a microtendencias específicas y de corta duración que reflejan influencias culturales y cinematográficas. Desde el “normcore” hasta el reciente “mermaidcore”, estas tendencias responden a cambios en la moda y la cultura popular. El “tenniscore” es una muestra más de cómo la moda se reinventa constantemente, integrando elementos tradicionales y modernos para crear estilos frescos y relevantes.

La evolución del “Core Aesthetic” en la moda ha llevado a la creación de diversas microtendencias que reflejan los intereses y valores de diferentes generaciones. Por ejemplo, el “normcore”, que promueve un estilo básico y funcional, ha sido adoptado por aquellos que buscan pasar desapercibidos mientras mantienen un sentido de comodidad. Esta tendencia, que surgió en 2013, continúa siendo relevante hoy en día, demostrando que la moda no siempre tiene que ser llamativa para ser significativa.

La versatilidad de estas prendas permite que sean utilizadas en diversos contextos, desde reuniones informales hasta eventos más formales / Web

En 2017, el “gorpcore” emergió como una tendencia que enfatiza la funcionalidad y la comodidad, inspirándose en la ropa de senderismo y actividades al aire libre. Esta tendencia ha sido adoptada por aquellos que valoran la practicidad y la durabilidad en su vestimenta diaria. El éxito del “gorpcore” subraya la importancia de la funcionalidad en la moda moderna, especialmente en un mundo donde la comodidad y la versatilidad son cada vez más valoradas.

Recientemente, el “Barbiecore” ha capturado la atención del público, inspirado por el éxito de la película “Barbie”. Este estilo se caracteriza por el uso abundante del color rosa y los tacones altos, y ha sido adoptado por varias celebridades que buscan emular la estética de la icónica muñeca. La popularidad del “Barbiecore” demuestra cómo las influencias cinematográficas pueden impactar las tendencias de moda, creando estilos que resuenan con un amplio público.

Otra tendencia destacada es el “Balletcore”, que evoca elementos del ballet con tutus, faldas con vuelos, tonos rosado pastel, ballerinas y enterizos ajustados. Esta estética romántica y delicada ha sido adoptada por aquellos que buscan un estilo elegante y femenino, inspirado en la gracia y la belleza del ballet. El “Balletcore” destaca la capacidad de la moda para capturar la esencia de diferentes disciplinas artísticas, creando estilos que son tanto visualmente atractivos como culturalmente significativos.

El “Cottagecore” fusiona la moda con la vida campestre, evocando romanticismo mediante vestidos vaporosos, cestas de mimbre y mangas abullonadas. Esta tendencia ha sido popular entre aquellos que buscan un escape de la vida urbana, aspirando a una existencia más simple y conectada con la naturaleza. La popularidad del “Cottagecore” refleja un deseo creciente de reconectar con la naturaleza y abrazar un estilo de vida más lento y contemplativo.

Con el reciente estreno del live action de “La Sirenita”, surge una corriente conocida como “mermaidcore”. Esta estética despliega tonos iridiscentes, motivos marinos y perlas, acercando a los seguidores al mágico mundo acuático. La popularidad del “mermaidcore” subraya la influencia de los medios en la moda, demostrando cómo las narrativas cinematográficas pueden inspirar nuevas tendencias y estilos.

La moda tampoco ha dejado de lado el estilo oscuro y gótico. El “gothcore” es una microtendencia que ha conquistado a celebridades como Olivia Rodrigo. Fusionando tonalidades negras, cuadros escoceses, accesorios de metal, plataformas y corsés, logra una apariencia que seduce a los amantes de lo sombrío. El “gothcore” destaca la capacidad de la moda para capturar una amplia gama de emociones y estéticas, ofreciendo a los consumidores una forma de expresar su identidad a través de su vestimenta.

El tenniscore no solo celebra el deporte, sino que también redefine la elegancia y la funcionalidad en la moda urbana. En un mundo donde la comodidad es clave, esta tendencia sigue ganando terreno, consolidándose como un pilar del estilo contemporáneo. La fusión de elementos deportivos con influencias urbanas ha creado un estilo versátil y atractivo que resuena con diversas generaciones. A medida que la moda continúa evolucionando, el tenniscore representa un ejemplo de cómo las tendencias pueden adaptarse y reinventarse, ofreciendo a los consumidores nuevas formas de expresar su estilo y personalidad.

La combinación de prendas deportivas con elementos urbanos también ha facilitado la creación de looks únicos y personalizados / Web