París está quedando lejos

Edición Impresa

Por EZEQUIEL FERNANDEZ MOORES

La mañana del sábado había arrancado difícil. En rigor, la previa a la inauguración de los Juegos Olímpicos de París tampoco había sido agradable. El miércoles la derrota con escándalo de la selección de Javier Mascherano contra Marruecos. Y el jueves la caída de Pumas7 en cuartos de final contra Francia, en un estadio con 80 mil personas silbando a la Argentina, consecuencia de la canción racista de la selección mayor en Miami, tras la conquista de la Copa América, y de las torpezas que fue cometiendo luego el gobierno nacional, que aprovechó para dirimir sus cuestiones internas.

La selección de Mascherano se rehízo ayer con un buen triunfo 3-1 contra Irak. La lógica indica triunfo en la última fecha contra Ucrania y clasificación para mantener aspiración de medalla (posible duelo contra Francia en hipotéticos cuartos de final). El rugby, en cambio, no tuvo chances de recuperación. El partido del jueves contra Francia era a todo o nada. Pobre inicio y, pese a eso, clara chance de victoria a cerca de dos minutos del final. Argentina estaba un try abajo y Marcos Moneta tenía la pelota. Pero “El Rayo” intentó (inoportunamente y mal ejecutado) un “sombrerito” y allí se diluyeron las ilusiones. Inoportuno porque Argentina tenía un jugador más. Y mal ejecutado porque esa jugada, que tantas alegrías le había dado en muchos partidos, esta vez falló. La patada quedó corta.

La selección no solo quedó afuera del podio. También del sexto lugar, porque el sábado volvió a perder, contra los All Blacks, otro partido que pudo haber ganado. Fue claro que el equipo de Santiago Gómez Cora llegó a su pico tres meses antes de los Juegos, cuando lideró el ranking mundial del circuito. Era, a mi juicio, la máxima y casi única esperanza legítima de oro en París. Fue imposible mantener ese nivel. Ojalá lleguen otras chances.

La fiesta parisina comenzó opacada por la lluvia. Fue novedosa la fiesta de apertura, los barcos por el Sena, Francia exhibiendo toda su historia y diversidad. Y la imagen de los atletas argelinos lanzando rosas al río, homenaje a compatriotas asesinados por la policía francesa en una revuelta independentista de 1961. El pasado no se cancela. Allí estará siempre el colonizado para recordarlo. Sabemos que el Comité Olímpico Internacional (COI) hace malabares para esquivar todo roce político. Será difícil que no sucedan más episodios en estos Juegos, cuando siguen cayendo bombas sobre Gaza y habrá deportistas musulmanes en plena competencia contra Israel.

 

La “medalla” de Argentina hasta el momento fue la designación de Werthein en el COI

 

El deporte argentino sí logró una “medalla” en la apertura. Pero no sucedió en el campo ni en el gimnasio. Fue en los escritorios. Gerardo Werthein, ex presidente del Comité Olímpico Argentino (COA), fue designado vice del COI. Se esperaba. En su momento, Werthein impulsó nuestro deporte olímpico alentando la creación del Enard, autónomo. Pero luego miró hacia el costado cuando el gobierno de Mauricio Macri quitó esa autonomía y empobreció el financiamiento de nuestro deporte. Ahora, embajador argentino en Estados Unidos en el nuevo gobierno de Javier Milei, Werthein parece más atareado por la política. Nuestro deporte otra vez relegado.

Juegos Olímpicos de París 2024

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE